El misterio por la desaparición de Nicolás Sabena cumple una década. Mientras continúa la búsqueda y la investigación para determinar qué fue lo que sucedió con el joven, su familia difundió una serie de imágenes que fueron editadas con el objetivo de simular la progresión de su rostro con el paso del tiempo y serán incluidas en el expediente judicial.
El joven tenía 21 años cuando mantuvo el último contacto con su familia, el 14 de septiembre de 2008. Desde entonces, nada se supo de él.
El caso movilizó y conmocionó a la ciudadanía riocuartense y a pesar de las denuncias por la connivencia policial y judicial que fueron realizadas por la querella, la Justicia determinó en 2014 que Francisco “El Yaca” Vargas, su padre José Vargas y su hermana Lucía Inés fueron los autores de la desaparición de Nicolás.
Los condenados por secuestro coactivo agravado son miembros de la familia Vargas, a cuya vivienda solía acudir Nicolás en reiteradas oportunidades.
Pese a esta condena, la Justicia no pudo determinar todavía qué pasó con Nicolás después de ese último contacto con su familia, el 14 de septiembre de 2008 y por eso, la investigación sigue vigente, sobre todo, movilizada por su madre, Rosa Sabena, quien estudió abogacía y ahora lleva adelante las medidas para poder esclarecer el hecho.
En ese marco, a 10 años de su desaparición, la familia del joven encargó un trabajo fotográfico que muestra la progresión del rostro de Nicolás, quien hoy tendría 31 años. Se trata de una serie de imágenes editadas digitalmente que serán incluidas en el expediente judicial que tiene a su cargo del fiscal Fernando Moine.