Debido a que el aniversario N°168 del general José de San Martín fue el día viernes pero el feriado se trasladó al lunes, Telediario habló con el escritor local, Walter Bonetto, para hacer una síntesis de la vida del padre de la Patria y para relatar los pasajes del prócer por la ciudad de Río Cuarto.
«San Martín, por el cruce de los Andes, está visto como un militar de fama universal porque eran muy pocas las hazañas de los militares, que fueron capaces de organizar un ejército de la nada, como lo hizo San Martín y cruzar los Andes. Él, está comparado en la historia universal con el cartaginés Aníbal que cruzó los Alpes para luchar contra los romanos, con las campañas de Napoleón, así está considerado San Martín», cuenta Bonetto.
Para darle dimensión al fenómeno, el investigador señala también que «en muchas escuelas militares del mundo se estudia el cruce de los Andes por la hazaña que significó». También reconoce la importancia de la batalla de Chacabuco, de Maipú, el momento en el que el General se dirigió al Alto Perú, donde se enfrentó con Bolívar y cuando se produjo el encuentro de Guayaquil, donde San Martín le entregó el ejército a Bolívar. «Por esto último el General fue visto como un traidor en Buenos Aires. Sin embargo, yo puedo decir que fue un grande, fue un patriota verdaderamente. Nos falta muchos San Martín en esta patria, lamentablemente», confiesa Bonetto.
En cuanto a la historia del paso del Padre de la Patria por Río Cuarto, el escritor explica que «entre los años 1814 y 1823, el General transitó por la Villa de la Concepción de Río Cuarto en ocho oportunidades. La última vez fue en noviembre de 1823». Lo que Bonetto no tiene registrado es que San Martín haya dormido en nuestra ciudad, como muchas veces se escucha en algunos relatos. «Sí hay episodios de que él ha pasado por Río Cuarto o cuando se entrevistó con el teniente Flores, que era el comandante militar, un oficial que estaba en Río Cuarto y admiraba mucho a San Martín y lo ayudaba en la medida que podía. También pasó por Achiras, donde hay vales del momento en que retiró animales como mulas y caballos. Y además existen registros de que ha pasado Remedios de Escalada, la cual estaba muy enferma de tuberculosis, y Merceditas cuando tenía dos años».
El investigador comenta que cuando el libertador regresó a Buenos Aires, su mujer ya había muerto. «Él tomó su niña en brazos y se fue a Europa. Se marchó enfermo, divorciado de la patria, viudo del hogar y rechazado por los pueblos redimidos porque, en ese momento, era mala palabra San Martín luego de haber entregado el ejército. No lo querían porque no le había hecho caso al gobierno de Buenos Aires en el objetivo de reprimir las guerras civiles. Luego vivió muchos años con mucha pobreza hasta que murió en Francia el 17 de agosto de 1850», concluye Bonetto.