Dinamarca parte con ventaja en su pugna por unirse a los Bleus en la ronda eliminatoria.
Francia ya está en octavos, por lo que abordará su último partido del Grupo C sin presión, mientras que Dinamarca parte con ventaja en su pugna por unirse a los Bleus en la ronda eliminatoria. Los daneses solo tienen que evitar la derrota, e incluso podrían lograr el pase si pierden si Australia no gana contra la ya eliminada Perú e incrementan su diferencia de goles lo suficiente como para superarla.
En su etapa como jugador, Didier Deschamps se quedó en el banquillo en su último partido de la fase de liguilla de Francia 1998, contra Dinamarca. Seguro que no le importaría cosechar un resultado similar, dado que en aquella ocasión, una Francia con muchos cambios en once inicial se llevó el gato al agua por 2-1 y se proclamó líder de grupo con pleno de puntos.
En última instancia, Age Hareide querrá lo mismo, aunque no necesariamente el mismo marcador, ya que a pesar de la derrota, Dinamarca también pasó a la siguiente ronda en 1998.