El Aula Mayor fue escenario de emociones por la coronación de años de esfuerzo no solo de los egresados.
Este viernes en el campus se concretó la 263ª colación de la Universidad Nacional de Río Cuarto. Recibieron diplomas 180 graduados en tres actos, que comenzaron a las 11, las 14.30 y las 18. Hicieron uso de la palabra por las autoridades el rector, Roberto Rovere y el vicerrector, Jorge González. Hubo coincidencia respecto del valor de cuidar la educación libre y gratuita, por sus aportes al crecimiento de ciudad, región y nación, en pos de una sociedad más justa.
En representación de los graduados hablaron Facundo José Suárez Alturria, comunicador social, Germán Barchiesi junto a Camila Roldán, ambos nuevos ingenieros químicos, y la flamante abogada María Constanza Eichhorn Grangetto.
Como es usual, el Aula Mayor fue escenario de emociones por la coronación de años de esfuerzo no solo de los egresados, también de sus familiares y amigos que los acompañaron en sus trayectorias educativas que les permitieron acceder al ansiado diploma.
Durante la colación el rector Roberto Rovere dijo a los graduados que “su desafío será ampliar y fortalecer el sentido de lo público, la condición inclusiva, el compromiso social, el respeto por los otros, la preservación del medio ambiente y la responsabilidad política”.
El profesor Rovere consignó que la Universidad Nacional de Río Cuarto “afirma a la educación como un derecho social tácito a fin de garantizar una ciudadanía plena”. Apuntó que “la educación pública ha sido y es la única que proporciona igualdad de oportunidades de acceso, independientemente del nivel socio económico del grupo familiar”.
Acotó que “esta universidad, cuyo potencial está ligado a su comunidad y región, tiene como misión dar igualdad de oportunidades a todos los habitantes del país a través de la enseñanza de grado, la enseñanza de posgrado, la investigación y la extensión y sobre estas bases define sus dimensiones, proyecta el ritmo de su expansión, vuelca sus capacidades de innovación para contribuir a su desarrollo”.
Claro que también está la oposición de “los representantes doctrinarios del libre mercado en el mundo”, quienes “continúan en sus intentos de imponer una agenda que les permita relanzar sus pretensiones político-empresariales para el ámbito de la educación pública superior con el fin de estandarizar una mano de obra adecuada y disciplinada para sus empresas, además de convertir el espacio público de la educación superior en un mercado de bienes y servicios”.
Asimismo, el rector hizo pública su inquietud por la “subejecución y el desfinanciamiento del presupuesto universitario, que nos han llevado a la paralización de proyectos y programas universitarios con aprobación ministerial; programas que se orientan a asegurar el derecho a la educación de calidad”.
Detalló que “la inversión nacional en las universidades pasó de un 0,86% del PBI en 2015 a 0,79% en 2016. La subejecución fue de 700 millones de pesos en 2016 y de 738 millones en 2017 (datos del Instituto de Estudios y Capacitación Conadu). Este desfinanciamiento afectó la obra pública universitaria, los hospitales universitarios, sistemas de becas estudiantiles y proyectos de extensión como también programas de mejoramiento de las carreras de la Universidad, evaluadas y acreditadas en definitiva actividades que afectan directamente a los beneficiarios del sistema: los estudiantes y la comunidad a la que se vincula”.
Otra de las referencias del profesor Rovere fue a los 47 años de vida que cumple la UNRC el 1 de mayo: “Este acto de colación de grado es el mejor momento para evocar nuestro aniversario, significa que aún estamos cumpliendo con la misión encomendada y para que además lo sea en memoria de todos aquellos docentes, no docentes, graduados y alumnos que lucharon para que estemos aquí como Universidad Pública, libre y gratuita”.
Pero, además, el 1 de mayo se conmemora el día del trabajador, permítanme por ello, que en nombre de la Universidad les dejemos un especial saludo a todos ellos y también a todos aquellos que pudiendo y queriendo no lo son, pues las políticas de exclusión implementadas los han transformado en desocupados”.
Pública, gratuita, democrática y participativa
Por la tarde hizo uso de la palabra el vicerrector, Jorge González, quien indicó que la UNRC “forma parte del sistema de educación pública, gratuita, democrática y participativa”, pilares que sostienen la comunidad universitaria”. “Ustedes como graduados, pueden dar fe de su puesta en práctica”, añadió.
El profesor Jorge González aseveró: “Observamos con preocupación, cómo desde los ámbitos de generación de políticas educativas y de los medios, hay una permanente degradación de la educación superior universitaria, como así también de otros sectores del sistema educativo”.
Con referencia al futuro y en retrospectiva, González manifestó: “En el mes de junio nuestra Córdoba, cuna de la reforma de 1918 y estandarte de la educación superior universitaria a nivel mundial , celebrará los 100 años de la misma, como así también una década de la Declaración de la Conferencia de Cartagena en el años 2008. En esta última se sostuvo que ‘la educación superior es un bien público social, un derecho humano y universal y un deber del Estado’”.
González presentó datos cuantitativos, a saber:
-El Sistema universitario de gestión estatal está conformado por 57 universidades nacionales, distribuidas en todas las provincias argentinas.
-Los últimos datos de 2016 hacen referencia a que 1.519.797 constituyen el universo de alumnos y que en ese mismo año ingresaron 372.467.
-En el año 1980 el sistema contaba solo con 315.931 alumnos.
Frente a las críticas que desde algunos sectores se formulan respecto de “las tasas de egreso”, González opinó que emanan de un “análisis lineal, un pensamiento muy reduccionista”. Consignó que la graduación o la deserción pueden verse estimuladas según el Estado sea “una manta que nos arropa y nos da certidumbre” o uno que deja al mercado, “con su cultura insensible, egoísta e individual”, quitar la manta que cobija a los ciudadanos.
El vicerrector compartió con el público en el Aula Mayor que “esta Universidad desde su formación en 1971, apuesta a una integración fuerte con la sociedad”. Entre otros ejemplos citó iniciativas tales como “prácticas sociocomunitarias, Universidad Barrial, programas de voluntariado, Programa Educativo de Adultos Mayores”.
“En lo académico –continuó- estamos trabajando en un Programa de Innovación curricular con todas las facultades, tendiente favorecer la permanencia con calidad de nuestros alumnos”.
Jorge González citó que en la faz de investigación, la UNRC cuenta con “ocho institutos de doble dependencia que concentrarán una parte importante de nuestros investigadores, y por supuesto tenemos muchísimas expectativas generadas en toda la comunidad”.
Hacia el final, sostuvo que en “Universidades argentinas solidarios”, documento suscripto por la UNRC, se reafirma la “profunda convicción del derecho humano a la educación”.
“Finalmente consideramos, que los legítimos reclamos por salarios dignos, jubilaciones justas, acceso a la salud, derecho al trabajo, como el derecho a huelga de los trabajadores, son derechos irrenunciables y se constituyen en actos de Educación Ciudadana.
Quiero también expresar unas palabras, a las familias, quienes confiaron en la Universidad Nacional de Rio Cuarto para la formación académica y profesional de sus hijos, valoramos el esfuerzo realizado durante estos años para alcanzar este logro, un graduado en la familia”.
Palabras de graduados
En el acto matutino, por los graduados dirigió un mensaje Facundo José Suárez Alturria, comunicador social. Apreció “la formación como personas de bien que nos llevamos de esta institución” y consideró que “salimos de este campus como ciudadanos formados y responsables”. Agradeció “a nuestras familias, que querían vernos triunfar y hoy nos ven profesionales”. También a los docentes, cuya tarea “no es fácil” pues “deben formar a los profesionales del futuro; a ellos y su tiempo invertido, muchísimas gracias”, lo mismo que “a todas esas personas que nos encontramos en la universidad”.
Feliz porque “nos llevamos a muchos amigos que recordaremos por el resto de nuestras vidas”, Suárez Alturria afirmó que “la carrera que empezamos hace algunos años no era para ganarle a alguien sino para superarnos a nosotros mismos”. En tanto, destacó que “es nuestro deber defender la universidad pública y hacer lo posible para que otros también la puedan tener”.
A las 14.30 hablaron los ingenieros químicos Germán Barchiesi junto a Camila Roldán. Barchiesi dijo que “hoy es un día muy especial en el que celebramos con orgullo nuestro graduación. Se cierra un ciclo y se abren las puertas de un nuevo camino seguramente tan maravilloso como el recorrido que hemos hecho en esta nuestra Universidad. Esperamos no olvidar quienes somos, de donde venimos y especialmente no olvidar nuestros sueños que nos han traído a este momento. Aquellos que son el motor de nuestras vidas y que nos permiten marcar metas con el afán de alcanzarlas. Nunca dejemos de luchar por nuestros sueños.”
En tanto Camilo Roldán expresó: “Queremos agradecer a la UNRC, a todos. A las autoridades, a los docentes, a los nodocentes, por habernos permitido estudiar y hacer uso de estas instalaciones que con mucho esfuerzo mantuvieron y mantienen para nosotros y para quienes vendrán. Por esto es un deber de nosotros como graduados llevar a donde quiera que vayamos el buen nombre y hacer una buena labor en la sociedad porque somos graduados de esta Universidad. Quiero recalcar que este diploma pertenece a toda la sociedad porque proviene de una universidad pública y gratuita que se mantiene gracias al aporte de todos”.
Ambos graduados agradecieron a sus familias por el esfuerzo realizado para poder desarrollar una carrera universitaria.
En el acto de las 18 habló la flamante abogada María Constanza Eichhorn Grangetto, quien dijo, entre otros conceptos, “este logro, esta meta cumplida no es un logro individual, es un logro colectivo, de nuestras familias, de nuestros compañeros, de todos los miembros de la Universidad y de la sociedad en su conjunto, por lo tanto es a todos ellos a quienes tenemos que agradecer tener este título en nuestras manos”.
“Este año se celebran 100 años de la Reforma Universitaria de 1918 y fueron esos jóvenes del ´18 junto con los trabajadores y un sector de la sociedad que decidieron hacer escuchar su voz, salir de la comodidad de las aulas y decir lo que se piensa. Organizarse y conseguir transformaciones y ellos mismos hablaron que estaban revolucionando el sistema universitario”, agregó.
Reflexionó que “hoy decir revolución parece una mala palabra pero un gran abogado nos enseñó que revolución es el sentido del momento histórico, es cambiar todo lo que tenga que ser cambiado, es igualdad y libertad plena, es defender valores en los que se cree, es luchar con audacia, inteligencia y realismo”.
Y se preguntó qué tiene esto que ver con la colación de grado. Dijo: “Tiene todo que ver porque nuestra Universidad, la educación, están viviendo un momento de crisis, de desfinanciamiento y desprestigio. Lo mencionó en estas palabras porque elegimos que nuestra educación sea pública y es nuestro deber como profesionales es cuidarla y defenderla para que no tengamos que lamentar que en esta aula haya asientos vacíos”.
Las ceremonias
En las distintas ceremonias se proyectó un video alusivo a la historia de la UNRC que este 1 de mayo cumple 47 años. Tras lo cual se produjo el ingreso de las autoridades universitarias. Momentos después de la Bandera de Ceremonia de la UNRC y de las facultades. Se interpretó el Himno Nacional Argentino, que sonó en vivo merced al profesor Matías Targhetta y las voces del Coro universitario. El propio profesor Targhetta interpretó seguidamente el Impromptu 2 de Franz Schubert. También puso en el piano el Monólogo del Río de Antonio Tarrago Ros y La Trunca Norte de Raúl Mercado y Oscar Alem. Y además interpretó Danza de la Moza Donosa y Danza del Gaucho Matrero de Alberto Ginastera.
Luego se vivió un momento de profundo significado y emoción. Fue cuando el rector, Roberto Rovere, transitó los pasos de su asiento al púlpito para la toma de juramento profesional. Los flamantes egresados se pusieron de pie y se comprometieron a ejercer todo aquello que de la casa de estudios se llevan con vista a construir un horizonte honesto, probo, con crecimiento para todos.
Considerando las tres ceremonias recibieron sus diplomas 180 graduados, 35 de la Facultad de Agronomía y Veterinaria; 35 de la Facultad de Ciencias Económicas; 26 de la Facultad de Ciencias Exactas; 69 de la Facultad de Ciencias Económicas y 15 de la Facultad de Ingeniería.
Los graduados que se fueron del campus con un título bajo el brazo llegaron a la ciudad procedentes de diversos lugares, entre ellos: Berrotarán, La Carlota, Las Higueras, Sampacho, Almafuerte, Maggiolo (Santa Fe), Mattaldi, Adelia María, San Juan, Villa Mercedes, General Pico, Pozo del Molle, San Pedro (Jujuy), Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Serrano, Alcira Gigena, San Salvador de Jujuy, Coronel Charlone, Catamarca, Monte de Los Gauchos, Las Heras, Mendoza, Pocitos, General Cabrera, Huinca Renancó, Las Acequias.
Potenciar la graduación
Cabe destacar que en la colación, como viene sucediendo desde su implementación, recibieron sus títulos egresados del programa Potenciar la Graduación. Esta iniciativa, vehiculizada a través de Secretaría Académica de la Universidad y con la labor mancomunada de las facultades mediante coordinadores y docentes de las carreras, ha permitido concluir estudios a quienes, por motivos familiares, laborales o de otra índole, habían cursado gran parte de ellas y resuelto discontinuarlas. El cierre de la etapa universitaria se hace factible y así Potenciar la Graduación es nombre de programa y realidad cotidiana desde hace dos años en el campus.