Ese es el porcentaje de distritos con plantas en funcionamiento, mientras que 34,4% posee la estructura, pero no está operativa. Los datos surgen de un relevamiento presentado por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación.
Sólo el 8,3 por ciento de los municipios del país cuenta con una planta de separación de residuos sólidos en funcionamiento, un 34,4 por ciento posee la estructura pero no está operativa y el resto directamente no la tiene, según un relevamiento presentado por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable (MAyDS) de la Nación en el marco del lanzamiento de un programa de la Unidad de Ciudades Sustentables.
La encuesta, que fue realizada a más de cien municipios que adherirán al programa para conocer el estado de situación en materia de sustentabilidad, arrojó además que el 44,8 por ciento de estos distritos cuenta con puntos verdes, que el 68,8 por ciento realiza campañas de reducción de residuos mediante compostaje y reciclaje y el 64,5 hace campañas de concientización de medio ambiente en general.
Sin embargo, a la hora de poseer una planta de separación de residuos sólidos urbanos, el 42,7 por ciento cuenta con esta estructura pero sólo el 8,3 tiene la planta operativa.
«La cantidad de plantas que hay sin funcionar es un dato muy llamativo, esto tiene que ver con las inversiones que se hicieron cuando los vientos políticos eran favorables para una intendencia, después se cortaron y dejaron de funcionar porque no hubo una planificación del presupuesto del día después de la inauguración», expresó el titular de la cartera ambiental Sergio Bergman, en la presentación de un programa destinado a brindar ayuda técnica y económica a municipios en pos de una estrategia sustentable a largo plazo.
En este contexto, el ministro expresó que «desde le Ministerio de Ambiente trabajamos de manera transversal con otros ministerios como Interior o Modernización. Durante estos meses ustedes han encontrado que desde estas carteras se les daban herramientas. Lo que nosotros queremos hoy es cerrar el círculo, que nadie deje de darles nada pero que esto tenga un sentido y una lógica de desarrollo sustentable».
Y señaló que «no queremos que la idea de sustentabilidad se reduzca a residuos, que fue una demanda fuerte que encontramos; para nosotros la gestión de la basura es un tema de saneamiento, no de ambiente; hasta el momento ustedes remitían a un programa de insumos y subsidios».
«Lo que nosotros pensamos es que la gestión de residuos es tan estructural como el agua y las cloacas y por eso debe estar en saneamiento, porque necesita de un master plan federal; entonces así como nadie puede pretender que un municipio solucione solo los temas de agua y cloaca, lo mismo pasa con la basura; se necesita escala -que serían los consorcios de los municipios por regiones- y recursos para aquellos que quedan aislados», sostuvo.
Bergman afirmó que «la cuestión de la gestión de la basura es vital porque aquel intendente que no gobierna la basura no gobierna el municipio» y destacó que en muchos casos, «más del 60 por ciento de los recursos están destinados a la recolección y disposición de residuos».
El ministro aseveró que «este cambio de mirada necesita de ustedes (por los intendentes)» y afirmó que agua, cloaca y residuos son elementos que establecen «umbrales mínimos» de dignidad acorde a una política de derechos humanos.
En referencia al relevamiento realizado previo al lanzamiento del programa, el titular de la cartera ambiental aclaró que «estos datos nosotros no los pedimos para imputarlos de nada, sino para sincerarnos; si hacemos las cosas bien ustedes serán las cabezas de un gobierno que no sólo le dice la verdad a la gente, sino que además realizarán el puntapié inicial para soluciones estructurales».
En Argentina, el 92 por ciento de la población vive en ciudades, un porcentaje levemente más alto que muchos países pero acorde al proceso de urbanización de la población mundial.
En febrero de este año el MAyDS creó la Unidad de Ciudades Sustentables (UCS) con el objetivo de generar un “Plan de Sustentabilidad” para revertir la deficiente situación ambiental de muchas ciudades y colaborar en la mitigación del cambio climático.
Entre los lineamientos de la Unidad «se apunta a desarrollar acciones que contribuyan a su mejora ambiental, considerando entre otros, el cierre de los basurales existentes; la disminución del consumo de energía y su pasaje al uso de las provenientes de fuentes renovables; la mejora del espacio público y sus zonas verdes; el cambio de sistema e incremento del alumbrado público eficiente; entre otros aspectos».
«Este programa no es un enlatado prescrito por el Ministerio, es un camino con lineamientos basado en los objetivos de desarrollo sustentables que propone la ONU para el milenio, pero que se tiene que ir concretando en torno a las necesidades que tiene cada municipio, sobre la base de consensos éticos y con trabajo técnico», concluyó Bergman.