El Papa Francisco reiteró que no se puede servir a Dios y a la riqueza.»Nos alejamos de su amor cuando vamos hacia una búsqueda obsesiva de bienes terrenales», señaló.
«No podéis servir a Dios y a la riqueza. O al Señor, o a los ídolos fascinantes pero ilusorios», dijo el sumo pontífice.
Francisco reiteró que esta es una elección que se debe renovar continuamente «porque las tentaciones de reducir todo al dinero, al placer y al poder son apremiantes». Además agregó que son unos ídolos que «portan resultados tangibles y al mismo tiempo fugaces».
El Papa criticó los actos que se apoyan «en bienes inmediatos y contingentes, olvidando y a veces rechazando el bien supremo, el amor paterno de Dios».
«Nos alejamos del amor de Dios cuando vamos hacia una búsqueda obsesiva de bienes terrenales y de las riquezas, manifestando así un amor exagerado a esta realidad», subrayó.