Investigadores de La Haya revelaron la existencia de al menos 47 bebés momificados de forma individual incrustados dentro del cuerpo del animal gigante egipcio.
Un escáner 3D del esqueleto de un cocodrilo egipcio, que tiene más de 2.500 años de antigüedad, revela la existencia de al menos 47 bebés momificados de forma individual incrustados dentro del cuerpo del animal gigante.
Según explicó la investigadora del Museo de Leiden, Lara Weiss, se trata de un descubrimiento «sorprendente y extraño» en un animal de 3 metros de largo, que ya ha sido sometido a decenas de pruebas anteriores.
La tomografía, que muestra a la perfección lo que se esconde en el interior del animal, fue realizada por la empresa sueca de tecnología Interspectral, capacitada para llevar a cabo escáneres tridimensionales avanzados.