El ex ministro de Planificación Federal y actual diputado nacional Julio De Vido fue enviado a juicio oral y público en el marco de la causa en la que se investiga su responsabilidad penal en la tragedia ferroviaria de Once, en la que murieron 51 personas y una por nacer, y otras 789 resultaron heridas.
El magistrado dispuso la clausura de la instrucción y la elevación a juicio del ex ministro De Vido y del ex titular de la Unidad de Renegociación y Análisis de Contratos de Servicios Públicos (UNIREN), Gustavo Simeonoff, según informaron fuentes judiciales.
El ex funcionario kirchnerista está acusado de haber tenido conocimiento del mal estado en el que se encontraba parte del sistema ferroviario y no haber aplicado los controles y las sanciones correspondientes a quienes explotaban el servicio de transporte público en la época en la que se produjo el choque del tren de la línea Sarmiento, ocurrido en la estación de Once el 22 de febrero del 2012, a las 8.28.
Hace dos semanas, el fiscal González remarcó que los delitos por los que los ex funcionarios deben ser juzgados son «estrago culposo, agravado por el resultado de muerte y lesiones, y defraudación por administración fraudulenta agravado por ser en perjuicio de una administración pública».
El 10 de mayo, Bonadio había procesado a De Vido como presunto coautor del delito de descarrilamiento y participe necesario de defraudación contra la administración pública por administración fraudulenta y le trabó un embargo por 600 millones de pesos.
Esta elevación a juicio oral es la primera que recae sobre el ex ministro, quien además fue procesado en otras dos causas: una por irregularidades en los contratos ferroviarios y la otra por la compra de trenes en mal estado a España y Portugal.
Cuando lo procesó, el juez Bonadio entendió que al momento del accidente, De Vido tenía “efectivo conocimiento del deficiente estado del material rodante de la concesionaria”, como así también del “sostenido decaimiento de los bienes dados en concesión para la prestación del servicio”.
El fiscal Gónzalez recordó en su dictamen que De Vido está imputado por «no haber controlado las condiciones de funcionamiento en cuanto a la utilización del material rodante, de la infraestructura, del personal transferido y la aplicación de fondos públicos que el Estado Nacional puso a disposición de la empresa Trenes de Buenos Aires S.A».
«La inacción del nombrado, en función del rol que desempeñaba, como de las dependencias subordinadas -pese al notorio deterioro de los bienes afectados a la concesión-, posibilitaron las circunstancias precedentemente detalladas», sostuvo el representante del Ministerio Público.
«En la empresa concesionaria se omitieron realizar las tareas de mantenimiento y sistemáticamente no se ejecutaron los planes que se encontraban obligados a cumplir, circunstancia que ocasionó un perjuicio económico al erario público, como consecuencia del grave deterioro de los bienes concesionados», sostuvo.
De concretarse el juicio contra De Vido y Simeonoff, sería el segundo proceso oral y público por la tragedia de Once dado que el año pasado concluyó el primero en el que fueron condenados los secretarios de Transporte Ricardo Jaime y Juan Pablo Schiavi; el dueño de la empresa que explotaba el servicio Claudio Cirigliano (TBA); el maquinista del tren Marcos Córdoba y a otros 17 ex directivos de la compañía.
El primer juicio fue llevado adelante por el Tribunal Oral Federal 2 que dispuso en su veredicto que el debía ser investigada la responsabilidad de Julio De Vido, quien fuera titular de la cartera de la que dependía la secretaria de Transporte cuando se un tren de la línea Sarmiento chocó en la estación de Once.
(Telam)