Lionel volvió a actuar el sábado por la noche como titular en el seleccionado argentino y lo hizo como siempre, jugando y asistiendo para otra cómoda victoria en la Copa, pero además marcó el gol con el que alcanzó a Gabriel Batistuta como máximo anotador.
«Lo empaté, no lo quebré, pero estar junto a Gabriel Batistuta como máximo goleador de la selección, con todo lo que éso significa, para mi es un verdadero orgullo», le confesó Messi a Télam tras una jornada petórica de emociones en el Gillette Stadium, de Boston, donde casi 60,000 personas presenciaron un hecho histórico en la vida de Messi y del fùtbol argentino.
«Pero además estoy contento porque no solamente pude convertir, sino que ayudé al equipo con el pase que le hice a (Gonzalo) Higuaín en el primer gol, Eso también fue muy lindo», resaltó respecto del 4 a 1 con el que Argentina sacó el pasaporte a las semifinales de este certamen, instancia en la que enfrentará a los Estados Unidos, el próximo martes en Houston.
Y destacó que el objetivo para este encuentro «era pasar de ronda y llegar a semifinales. Y lo conseguimos haciendo un gran partido y siendo superiores, salvo en el cuarto de hora final del primer tiempo, cuando ellos nos presionaron y lograron quitarnos la pelota».
Messi ya lleva cuatro tantos en este torneo pese a que de los cuatro partidos jugados por Argentina el no completó ni dos, aunque eso no importó para que en solamente media hora le anotara tres a Panamá.
«El partido lo jugamos bien, salvo el cuarto de hora final del primer tiempo cuando ellos además de las tres opciones de gol que nos crearon, tuvieron un penal en esos minutos que atajó (Sergio) Romero (el ejecutante Luis Seijas le quiso picar la pelota y ‘Chiquito’ le adivinó la intención), pero después, en el segundo volvimos a jugar como al principio y rematamos el partido», describió.
«Por éso creo que debemos seguir de esta manera, yendo a buscar los partidos desde el principio, teniendo la pelota siempre. En lo que debemos mejorar es en no confiarnos ni dormirnos, como nos pasó en esos 15 últimos minutos del primer tiempo, porque si nos llegaban a convertir, ahí se iban a ir al vestuario con un solo gol abajo y en el segundo seguro que salían con todo», evaluó.