Según planteó la ex mandataria, el proyecto diseñado por el gobierno de Cambiemos provocará una «inequidad tributaria al eliminar impuestos progresivos (bienes personales y renta financiera) para los que más tienen».
Cristina Kirchner cuestionó con dureza el megaproyecto de pago a los jubilados y blanqueo de capitales que impulsó el Gobierno. En un texto que difundió a través de las redes sociales, la ex presidenta aseguró que la iniciativa oficial provocará «la destrucción del sistema previsional».
«Estamos ante un verdadero caballo de Troya. Pero adentro no vienen ni Aquiles ni Ulises. Por el contrario, este auténtico presente griego trae: el «huevo de la serpiente» para la destrucción del Sistema Previsional Argentino (SIPA)», aseguró la ex mandataria.
Cristina Kirchner contó que había recibido un mail del ex viceministro de Economía Emmanuel Álvarez Agis, ex número dos de Axel Kicillof , con un informe para «alertarla» sobre «las consecuencias» de la iniciativa de la Casa Rosada. «El mail no hizo más que confirmar mis peores temores», señaló.
Según planteó la ex mandataria, el proyecto diseñado por el gobierno de Cambiemos provocará una «inequidad tributaria al eliminar impuestos progresivos (bienes personales y renta financiera) para los que más tienen».
Criticó, además, «la ilegalidad al excluir del blanqueo a los familiares de los funcionarios políticos tanto a nivel nacional como provincial y municipal». También apuntó contra «la inconstitucionalidad de la mordaza impuesta a terceros o periodistas, que piensen en desatar los nudos de los Panamá Papers», en relación al polémico artículo 85 de la iniciativa, que impone penas de cárcel a los que divulguen los nombres de los beneficiarios del blanqueo de capitales. Mauricio Macri prometió que ese artículo será revisado.
«Y por si todo lo anterior fuera poco, la burla de establecer una quita de entre el 30% y el 60% para los jubilados que tienen juicio contra la Anses», resaltó.
Para Cristina Kirchner, la propuesta del Ejecutivo es «un auténtico bodrio legislativo» y lo comparó con el proyecto de superpoderes para Domingo Cavallo impulsado por el gobierno de la Alianza. «Cualquier coincidencia con la actualidad no es mera casualidad, sino absoluta causalidad», aseveró.
«Debo confesar que, como ex legisladora, y ante una rápida lectura del proyecto, lo que más llamó mi atención fue la mezcolanza de temas: blanqueo, jubilados, juicios, cambios de índices de actualización y edades del SIPA, venta de acciones del FGS, derogación de impuestos progresivos, acuerdos fiscales con las provincias», apuntó.
Horas antes de que las comisiones de Previsión Social y de Presupuesto y Hacienda se reúnan para emitir dictamen, la ex presidenta dijo que no le dirá a ningún legislador del Frente para la Victoria «cómo tienen que votar». «Son todos mayores de edad. Y algunos y algunas, legisladores desde los años 90, cuando quien suscribe votaba en soledad casi absoluta en los entonces bloques oficialistas», señaló.
Y remarcó: «Sé que para algunos las presiones de todo tipo, aún las de dudosa legalidad, les resultan insoportables. Creen, sinceramente, que su futuro político se juega en el resultado de una votación. O en el recinto del Parlamento. O ante las cámaras de televisión. O en las páginas de los diarios. O que depende de algún juez de turno».
Fuente: La Nación