Cuando el corazón pierde su ritmo estamos frente a una arritmia, aseguran los cardiólogos consultados.
Palpitaciones, mareos, desmayos, sudoración, palidez y dificultad para respirar son algunos de los síntomas. Aunque a veces no da señales.
La arritmia cardíaca es una enfermedad que afecta a todos por igual, sin distinción de sexo o edad.
Se diagnostica por la auscultación que se hace en un examen rutinario.
Un corazón normal late entre 60 y 100 veces por minuto.
Pero si la causa de la patología es interna, se suele recurrir a la toma de medicamentos o la instalación dispositivos como marcapasos.
Evitar el sedentarismo y la obesidad. Controlar la hipertensión, la diabetes y el colesterol alto nos ayudarán a prevenirlas.
Fuente Sociedad Argentina de Cardiología