Tras el derrumbe ocurrido el pasado viernes de parte de una obra en construcción en Quírico Porreca al 700, en el edificio del predio de Urú Curé, la esposa de un trabajador que resultó lesionado lanzó duras críticas a las condiciones laborales y deseguridad.
Desde Defensa Civil señalaron que no fueron informados sobre la presencia de heridos, debido a que las personas lesionadas fueron derivadas «en camionetas a una clínica privada»
Patricia Molina dijo en diálogo con Telediario que «la empresa no llevó a los obreros golpeados en ambulancia como corresponde»
«Estas son las anomalías a las que estamos acostumbrados con los empresarios de la construcción en Río Cuarto. Para ellos, cada trabajador es un número. No había ningúna medida de seguridad, no les compran la ropa, nada», enfatizó.
Molina advirtió que «el gremio no se acercó nunca, huba una denuncia ante el Ministerio de Trabajo pero hasta el día de hoy no pasó nada».
«Depende del municipio»
El subjefe del organismo, Rogelio Ferrario, afirmó que la empresa «cumplía con las medidas de seguridad». De todos modos, aclaró que «la verificación y una eventual clausura dependen del municipio».
«Se estaba haciendo la construcción de una planta. Aparentemente, los trabajadores estaban llenando la losa y cedió el sector del medio hasta caer. No se desplomó del todo sino que cedió lentamente y esto permitió que la gente pudiera salir rápidamente del lugar», explicó Ferrario.
Sobre las medidas de seguridad, Ferrario resaltó: «Evidentemente estaban dadas. Al no haber víctimas ni heridos, funcionó el sistema»
Comments are closed.