En medio del fuerte debate universitario por el ajuste presupuestario y el conflicto salarial docente, el rector Roberto Rovere señaló que «se ponen en riesgo actividades ó poder lograrlas en su ideal»
En diálogo con Telediario, Rovere precisó que evalúan realizar una sesión extraordinaria del Consejo Superior para analizar la situación económica y definir medidas en común con todos los claustros.
Sobre la reunión con el presidente Mauricio Macri, «solo permitió paliar un aspecto particular ligado a la tarifa de luz»
«Eso es solo una parte de la discusión. Gran parte del debate está ligado con el tema salarial, con un impacto del 90 por ciento en el prespuestario», indicó.
El rector dijo que «se aspira a que no se vea afectado el tema salarial y de becas estudiantiles»
«Nos preocupa el funciamiento de la Universidad. Nos afecta el desfasaje de costos y se va a hacer imposible adquirir los insumos para todas las actividades. Se ponen en riesgo estas actividades ó lograrlas en su ideal», indicó.
Rovere dijo que «la medida de fuerza de los docentes afecta la realidad actual y cuando se logre un acuerdo, debe continuar el debate para dar cumplimiento con el calendario académico».
«La situación es conflictiva, pero no comparable con el 2001. Hoy el problema está centrado en una actualización de salarios docentes y esta semana se iniciará la disucusión con los no docentes. Esperamos que se pueda lgorar un acuerdo rápido y existan ajustes presupuestarios para garantizar el segundo cuatrimestre», indicó.
El rector admitió que «será un año difícil y nuestro objetivo es darle cumplimiento a la actividades fundamentales»
– ¿En este contexto, tiene la misma preocupación de los estudiantes sobre el riesgo de que puedan perder el cuatrimestre?
– Si, sin duda. Si no logramos un acuerdo salarial basicamente y se logran adecuar estos desfasajes presupuestarios sin dudas que sí.
Discusión de fondo
«Hay una discusión política de fondo y es el proyecto de universidad que tiene el Gobierno» Lo dijo Facundo Aguirre, presidente de la FURC, en medio de un fuerte debate universitario y el alto acatamiento al paro docente en el campus.
Plan Estratégico
El Consejo Superior de la Universidad Nacional de Río Cuarto decidió impulsar una actualización del Plan Estratégico Institucional de la UNRC, para lo cual definió diversas formas de participación de la comunidad universitaria para dar respuesta a desafíos como la deserción estudiantil en los primeros años, la reformulación de los planes de estudio y la fragmentación entre las disciplinas, entre otros.
La propuesta define una metodología de participación de todos los sectores que componen la Universidad para el debate de las principales problemáticas institucionales, de tal manera que en una etapa posterior se elabore un documento final con un nuevo Plan Estratégico Institucional para la Universidad.
La fundamentación de la propuesta hace hincapié en la necesidad de introducir cambios para “adaptar el Plan Estratégico de la UNRC a los nuevos tiempos”. La Universidad, en los últimos años, “ha logrado avances con relación a algunos de sus lineamientos estratégicos. Por ejemplo, en la discusión y decisiones en torno a las concepciones de ciencia; la relación entre investigación y transformación socio-económica y tecnológica; la creación de instrumentos y organizaciones para la promoción científica como los institutos de investigación y los centros de investigación, formación y desarrollo (CIFOD); la vinculación social de la UNRC mediante las prácticas socio-comunitarias, observatorios y creación del Consejo Social; y el desarrollo de estrategias para una mayor inclusión educativa tales como tutorías, alfabetización académica, articulación con el nivel medio, innovaciones pedagógicas, entre otras iniciativas”.
Sin embargo, la propuesta advierte que “hay problemas persistentes y desafíos pendientes. Por ejemplo, algunos indicadores de rendimiento, deserción y desgranamiento estarían revelando proceso de exclusión en los primeros años de las trayectorias académicas de los estudiantes. Otro desafío es la necesaria reforma curricular. Los planes de estudio siguen siendo rígidos y pocos integrados. La UNRC se debe una profunda discusión acerca de una política curricular que oriente la reformulación de planes de estudio o las nuevas ofertas curriculares”.
Agrega que “la fragmentación entre disciplinas, departamentos, carreras, facultades y equipos parece ser otro problema persistente que moviliza la discusión, análisis y proyección para generar dispositivos que modifiquen las gramáticas institucionales; esto es, nuevas formas organizativas que resuelvan dialécticamente la tensión entre lógicas disciplinares y lógica de los problemas sociales, entre autonomía de las facultades y generación de redes de cooperación interdisciplinarias”.