Por Vanina Cacace.-
“¿Qué dijo Cococho? ¿Cómo va a estar el tiempo?” La pregunta se repite varias veces en la tarde. En el taxi, en la verdulería, en la misma calle. Alguien siempre pregunta por él.
“¿Y Marita? ¿Usted es la Marita de Cococho?”, le preguntan a la señora que atiende en la boutique Silenzio. Desde que me viste, saltó a la fama y no necesariamente por eso. Es que a ‘Cococho’ le gusta describir al aire la ropa que llevo puesta, detalla géneros, cortes e inventa o «crea» colores como el ya famoso “azul matrá”, que a pesar de que le he preguntado hasta a dos o tres artistas plásticas, nadie conoce.
Sin embargo, la gente parece divertirse con sus descripciones que pueden confundir “animal print” con “animal planet” o derivar en las más curiosas anécdotas.
¿Qué dice Cococho que crea tanta complicidad con la gente? Cuidadito con criticarlo delante de sus fans, ese es una especie de dogma que aprendí por ensayo-error. Me sucedió una noche cuando estaba en el almacén de mi barrio y se me ocurrió quejarme por su pronóstico: las cinco señoras que estaban en la fila me reprendieron. Él es así, genera en los demás una complicidad inexplicable.
“¿Qué dice Cococho detrás de cámara?”, me preguntó un hombre mayor en la cola del banco. Y como él, tantos otros.
A todos les respondo que, por ejemplo, antes de desarrollar su pronóstico, en esos minutos previos, escucha atentamente el chiste que cuenta Jorge Dedominci y luego, ya al aire, trata de no tentarse. Claro que si no resiste la risa, intenta contarlo al aire. Cococho es así.
Por eso, la pregunta inevitable en la calle es “¿y es así de divertido siempre?”. Y si, hago memoria y siempre llega de buen humor, entra a la oficina cantando y adelantando los pronósticos.
“Lo que dicen con Cococho en la columna, ¿lo ensayan antes?”, arrojó en medio de una charla una mujer joven que maneja el taxi que me lleva al Canal por la mañana.
Me reí, porque pensándolo, todo surge en el momento en que se enciende la cámara.
Así, cada día es «hola Cococho»…. y GOOD SHOW.