Las Madres de Plaza de Mayo vieron demorado su habitual ingreso de los jueves a ese paseo público, al impedir la Policía Federal durante media hora que instalaran el gazebo (carpa abierta) donde cada semana instalan un stand de difusión antes de realizar la tradicional marcha alrededor de la Pirámide que realizan desde épocas de la última dictadura militar.
La titular de la entidad, Hebe de Bonafini aseguró hoy que a las Madres «nadie» las va a sacar de la Plaza de Mayo», mientras que el abogado de la asociación, Juan Manuel Morente, explicó a Télam que «durante media hora, cuando quisieron ingresar a la Plaza por Hipólito Yrigoyen con la camioneta de las Madres, integrantes de la Policía Federal les dijeron que no podían hacerlo».
Morente relató que llegó al lugar después del llamado de los integrantes de la asociación, que la situación duró media hora y que finalmente pudieron ingresar normalmente a armar el espacio en el que todos los jueves pasadas las 15.30 se reúnen y se disponen a marchar.
Al llegar a la Plaza Bonafini destacó que no iban a «aceptar ninguna disculpa de ninguna autoridad» por lo sucedido, cuando efectivos de esa fuerza federal se acercaron a darle las explicaciones de la demora.
Con más gente de la habitual, que se acercó ante la repercusión de los hechos en las redes sociales, las Madres agradecieron a los militantes, dirigentes y legisladores que se hicieron presentes al enterarse de la demora del ingreso, y marcharon con una bandera con la frase «La falta de trabajo también es un crimen».
Durante su posterior discurso, la dirigente criticó además la llegada del presidente norteamericano Barack Obama a la Argentina, prevista para el 23 y 24 de marzo venidero.