El gobernador respondió a los cuestionamientos de los gremios estatales por la ley que modifica el cálculo de las jubilaciones.
En una entrevista con La Voz del Interior, Juan Schiaretti se refirió a los cuestionamientos sobre la ley que modifica el cálculo de las jubilaciones provinciales. El gobernador dijo que con esta medida «le damos solución definitiva al problema del déficit de la Caja».
–¿Por qué impulsó en este momento una reforma a la ley previsional?
–Esta reforma jubilatoria no es sólo de este Gobierno. Es de la gran mayoría de los cordobeses, porque la votó el 80 por ciento de los legisladores provinciales, que representan al 80 por ciento de los votantes en la última elección en Córdoba. Y la votaron casi todos, porque entendieron que era la única manera de salvar a la Caja de Jubilaciones. Garantizamos las mejores jubilaciones del país. Por ejemplo, los pasivos de Luz y Fuerza cobrarán a fin de diciembre –en promedio– 39.300 pesos. Un mismo trabajador de ese sector, que está en una cooperativa que cobra del sistema nacional, está en 21 mil pesos. Fíjese la diferencia. Los municipales de la Capital cobrarán en promedio 31.300 mil pesos. Los del Banco de Córdoba y Social, más de 29 mil pesos. En promedio, los jubilados cordobeses percibirán 17.400 pesos. Pero lo importante de esta medida es que le damos una solución definitiva al problema del déficit de la Caja. Por eso, la oposición entendió esta situación y dejamos 25 años de parches, para darle una sustentabilidad definitiva al sistema previsional.
–Pero los estatales dicen que se trata de un ajuste en los haberes de los jubilados.
–Yo respeto la posición de los gremios, pero esta es una decisión que votó el 80 por ciento del arco político provincial. Podemos decir que fue una decisión de Estado para salvar definitivamente a la Caja de Jubilaciones. Respeto el derecho a peticionar de los gremios, dentro de lo que marca la ley. No me preocupa que reclamen.
–Sin embargo, hay estatales que argumentan que aportaron 30 años a la Caja provincial y ahora sienten que les meten la mano en el bolsillo.
–Yo digo siempre la verdad. Pueden haber aportado 30 años, pero el sistema tiene déficit y el resto de los cordobeses éramos quienes teníamos que aportar fondos para tapar ese rojo. Porque son 98 mil los jubilados provinciales. Lo que hay que garantizar es un déficit más racional. Córdoba llegó a esta situación porque se cometieron muchos errores en el pasado. Hay gente que se jubiló y sólo había trabajado dos años en la Provincia. Por eso Córdoba terminó teniendo 20 mil jubilados más que Santa Fe. Además, digo otra cosa. Cuando tengamos los números del nuevo Indec, voy a garantizar que ningún jubilado cordobés cobre menos de lo que marque la línea de la pobreza. Decidimos llevar a 7.500 pesos la jubilación mínima, que sería aproximadamente la línea de la pobreza. ¿Sabe cuántos jubilados cobraban menos de esa cifra? 10 mil. Eso es lo que hay que cuidar.
–¿Está convencido de que no se necesitarán más cambios la ley previsional, teniendo en cuenta que el anterior gobierno nacional exigía que Córdoba debía hacer reformas más profundas en su sistema jubilatorio?
–No serán necesarios otros cambios. Con la reforma que yo impulsé en el año 2008, evitamos que cualquiera se pudiera jubilar en la provincia. El sistema era un colador. Por ejemplo, yo tengo 43 años de aportes, de los cuales, sólo 15 corresponden a la Caja de Córdoba y me voy a jubilar en el sistema nacional. Es lo que corresponde, pese a que a nivel nacional se cobra menos.
–Luego de esta reforma, ¿cuál el déficit anual que tendrá la Caja?
–Son alrededor de 900 millones de pesos. Que es un déficit absolutamente manejable y por eso digo que es una solución estructural para el problema de la Caja de Jubilaciones.
–En este clima de conflicto con los estatales, ¿la discusión paritaria que viene en enero puede ser muy álgida?
–Vamos a ver cómo se da el tema inflacionario. En Córdoba, por ejemplo, este año, los empleados públicos recibieron –en promedio– casi un 37 por ciento de incremento salarial. Muy por encima de la inflación, que será de entre el 28 y el 30 por ciento, inclusive contando el rebrote que hubo en noviembre y este mes. También por encima del aumento de la recaudación provincial, que fue del 32 por ciento. Hay que ver qué pasa con los precios y negociar con la mejor predisposición posible.
–¿Esto puede determinar que haya un acuerdo trimestral y no anual, como ocurrió en los últimos años?
–Lo que yo digo es que hay que tener disposición para entender que estamos en una transición y que no tenemos claro cuál será el impacto de la inflación en este último mes del año. No hay que cerrarse en una única alternativa. Como siempre, este gobierno está dispuesto a dialogar y analizar todas las posibilidades.