El presidente electo de la Argentina, Mauricio Macri, se reunió con su par de Brasil, Dilma Rousseff, quien por estas horas afronta una seria crisis institucional. El encuentro se desarrolló en el Palacio de Planalto, en Brasilia.
Luego de la reunión bilateral, Macri brindó una conferencia de prensa en la que confirmó que Rousseff vendrá a la Argentina la semana que viene para participar de los actos protocolares por el recambio de Gobierno. Allí tiene previsto volver a encontrarse con la dirigente brasileña.
El líder de Cambiemos aseguró que el nuevo gobierno de la Argentina y la actual gestión de Brasil no tienen visiones encontradas sobre la situación de Venezuela. «Ambos países sostenemos una defensa inclaudicable con la democracia y los derechos humanos; ambos estamos mirando qué va a pasar el 6 de diciembre porque hay una enorme tensión en Venezuela», dijo Macri.
El futuro mandatario de la Argentina adelantó que pretende pedir la exclusión del régimen de Maduro del Mercosur por su persecución a la oposición política, particularmente a Leopoldo López y otros dirigentes que están detenidos. Se creía que esta posición podría representar un contrapunto con Rousseff en la audiencia de esta mañana.
«Yo lo que sentí es que hay preocupación y que cada uno lo expresa con su estilo. En el fondo de la cuestión, compartimos los mismos valores. Lo vamos a volver a hablar el 10 de diciembre en Buenos Aires», adelantó Macri.
Por otro lado, Macri manifestó el compromiso de ambos gobiernos de «fortalecer las relaciones comerciales», al afirmar que «ambos países estamos sufriendo procesos de recesión». «Si a Brasil le va mejor, a Argentina le va mejor, y viceversa», dijo.
Macri se trasladará este mediodía a la ciudad de San Pablo, donde compartirá un almuerzo con empresarios nucleados en la federación de industriales. El equipo de Cambiemos analiza si hay lugar para coordinar más reuniones en Brasil.
En este sentido, el mandatario electo expresó sus grandes expectativas por el encuentro con ese grupo de industriales, a los que calificó como «los más potentes de la región». «Vamos a contarles que venimos a establecer reglas de juego claras para que avancen con sus planes de inversión. Serán muy bienvenidos; tenemos que avanzar con la Integración en serio de ambas comunidades».
Tras esos encuentros, el mandatario volará a Santiago de Chile para cenar con la presidente Michelle Bachelet, antes de volver a Buenos Aires.
Macri partió temprano de Buenos Aires en un avión privado junto a su esposa, Juliana Awada, y un estrecho grupo de colaboradores entre los que se encuentran el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y la canciller Susana Malcorra.