Al menos 60 personas murieron y un número aún no determinado resultaron heridas en tres tiroteos simultáneos en diferentes puntos del centro de París. Además, se registra una toma de rehenes en la sala de conciertos Le Bataclan.
En tanto, un hombre armado con un fusil automático disparó contra los clientes de un restaurante en el distrito número 10 de París y causó la muerte al menos a dos personas e hirió a otras siete, según medios franceses.
Los explosiones tuvieron lugar en los alrededores del Stade de France, en las afueras de París, donde el presidente Francois Hollande se encontraba presenciando el partido de fútbol entre Francia y Alemania. El mandatario fue evacuado por el personal de seguridad, según el diario Le Parisien.
Justo en el mismo día en el que desde Londres y Estados Unidos anunciaban un golpe fatal contra el verdugo más famoso del ISIS, la capital de Francia se vio envuelta otra vez con varios hechos de violencia, dos de ellos cerca del estadio de Francia, donde se jugaba un partido entre Francia y Alemania, y donde estaba presente el presidente Hollande, que debió ser evacuado. Los otros fueron en restoranes del centro parisino.
Uno de los ataques ocurrió en inmediaciones de la plaza de la República, donde en enero último hubo multitudinarias marchas por el ataque terrorista a la revista satitica Charlie Hebdo.
De acuerdo a información de la Policía hay, al menos, 60 muertos y decenas de heridos. Otro ataque tuvo lugar en la sala Bataclan, situada en el número 50 del Boulevard Voltaire, donde los asaltantes armados con Kalashinkovs, tras disparar desde el escenario contra los asistentes a un concierto de rock, secuestraraon y mantienen como rehenes a unas 100 personas.
Según los testigos, el agresor disparó contra el restaurante desde un vehículo en movimiento, causando que los comensales se tiraran al suelo para evitar ser alcanzados por las balas.
El tercer ataque se produjo en los alrededores del Stade de France, donde se jugaba un partido entre la selección de Francia y la de Alemania.
Francia y varios otros países europeos estaban en alerta después del ataque realizado por un drone de Estados Unidos en la ciudad siria de Raqqa, que había matado al terrorista del ISIS conocido como «Jihad John», un ciudadano británico que estuvo detrás de la decapitación de varios secuestrados.
Los ataques registrados se registraron poco antes de las diez de la noche de este viernes en los distritos 10 y 11 de París. A este distrito el gobierno francés ya destinó un refuerzo de 100 soldados.
Varios medios reportaban otro ataque en el centro comercial del barrio Les Halles, en el corazón de París. La ciudad es un verdadero caos, con miles de policias en la calle y el temor de que los ataques empeoren.
Fronteras cerradas
El presidente de Francia, Francois Hollande, se reunió con el primer ministro, Manuel Valls, y el titular de Interior, Bernard Cazeneuve, para hacer balance sobre los tiroteos y explosiones de París, informó el Palacio del Elíseo.
Durante el encuentro, Hollande decidió cerrar las fronteras y decretar el estado de emergencia en todo el país.
«Francia debe ser fuerte frente al terror, debe ser grande. Los terroristas pretenden hacernos sentir miedo, paralizarnos de terror. Pero hay una nación que sabe defenderse del terror», fueron las palabras del mandatario.
En pleno partido
La selección de Francia, anfitriona de la próxima Eurocopa, derrotó a Alemania (2-0) en medio de un clima enrarecido, condicionado por la tragedia vivida en los alrededores del estadio Saint Denis, donde varias explosiones provocaron numerosos muertos.
Mientras los alrededores del Estadio de Francia eran presas del pavor a causa de una serie de atentados que llevaron a la evacuación del presidente de la República francesa, Francois Hollande, presente en el palco.
La tragedia vivida en París dejó en segundo plano el choque, marcado por el escándalo del chantaje con un vídeo sexual en el que están implicados Matheu Valbuena, como víctima, y Karim Benzema, imputado como presunto cómplice.
Precisamente, el suplente del delantero del Real Madrid con los ‘bleus’, Olivier Giroud, aprovechó el momento para acaparar el protagonismo. Igual que Andre Pierre Gignat, atacante del Tigres de México. Ambos se ocuparon de los goles con los que el conjunto de Didier Deschamps derribó a la actual campeona del Mundo.
Asumió la responsabilidad en el centro del campo Paul Pogba, que tomó la batuta del equipo. Sobresalió también Anthony Martial muy activo. Fueron ambos los mejores argumentos de una primera parte seria y sólida por ambas partes.
De hecho, el jugador del Manchester United impuso su magia para romper el equilibrio. Una fabulosa acción individual de Martial fue finalizada por Giroud, que solo tuvo que empujar el balón a la red.
Tras el descanso el equilibrio se mantuvo. Alemania buscó la igualada con acciones individuales que se toparon con la resistencia local.
Sin embargo, Alemania tuvo la igualada en un disparo de Thomas Muller que repelió el palo derecho de Hugo Lloris.
Fue la gran ocasión germana que en plena ofensiva dejó espacios aprovechados por su rival. Así llegó el segundo tanto, firmado en el tramo final por Gignac.
Fue un contraataque que compartieron Gignac, sustituto de Giroud, y Blaise Matuidi, encargado de llevar el balón. El centrocampista del Paris Saint Germain cedió el balón al atacante, que finalizó la jugada y batió a Manuel Neuer.
Fuente: Telam, Clarín, agencias internacionales