El Centro de Operaciones de Emergencia comenzó a articular el programa de emergencia ante posibles tormentas de magnitud, como las ocurridas en diciembre de 2013. La preocupación por el impacto del fenómeno del niño profundizan el trabajo de prevención.
El fenómeno climatológico de El Niño se anticipa como «uno de los más intensos que se hayan registrado» en la región, con factores contrapuestos que dan cuenta de abundante caudal de lluvias y períodos de seca que tendrán su impacto en las distintas actividades agrarias, según confirmó un informe elaborado por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires y difundido ayer por Télam.
De acuerdo a las previsiones meteorológicas, el informe anticipa al iniciarse la primavera 2015, los efectos del desarrollo de «El Niño» comenzarán a hacerse sentir con fuerza, intensificándose la circulación tropical y temprano del fenómeno, y su intensidad podrá «igualar o superar a los observados en las temporadas 1982/83 y 1997/98, los más vigorosos registrados con instrumentos modernos», según ese estudio.
Ante los pronósticos, en especial para octubre -el mes en que comienza la siembra de cultivos de verano- los productores rurales ya analizan volcarse hacia la soja, un grano más barato para implantar que el maíz, anticiparon algunas publicaciones especializadas en los últimos días.
En nuestra provincia, el observador meteorológico Mario Navarro viene anticipando desde hace unos meses que se espera que hasta diciembre se precipiten entre 450 y 650 milímetros, con una especial intensidad desde la segunda quincena de octubre hasta diciembre.
Según Navarro, promediando la Primavera, el ingreso de corrientes cálidas y húmedas tornará inestable el clima, desencadenándose tormentas de 40, 80 y hasta 100 mm, en corto tiempo y con intensidad. Una de las características que hacen prever estos pronósticos es el “inusual calentamiento sobre el océano Atlántico” que influirá en el aire húmedo y la formación de precipitaciones.
“La media de precipitaciones entre mediados de agosto y diciembre suele ser de 418 milímetros. Este año podemos esperar entre un 30 y 40 por ciento más”, precisó Navarro. Asimismo, indicó que entre enero, febrero y marzo del año pasado la media será de 400 mm, y que si bien habrá “eventos importantes” el fenómeno comenzará a mermar luego de la segunda quincena de febrero.