Rodrigo:
Venir caminando por una vereda del macro centro pensando en miles de cosas que te mantienen la vida acelerada y de repente encontrarte con un espectáculo como este, hace que te replantees la misma existencia. y pararte a mirar diez minutos la reacción de la gente que de la seriedad más profunda salta a una sonrisa contagiosa… simplemente es bello.