«Que todo el mundo lo entienda. Lo que está en juego no es la salida de Grecia de la eurozona, sino si estamos dispuestos a aceptar bajo chantaje el acuerdo no sostenible que nos ofrecieron», dijo Tsipras en un mensaje televisado de final de la campaña de cara a la consulta popular.
Las palabras de Tsipras buscan poner paños fríos en la antesala de la polarizada consulta y neutralizar lo que desde su partido Syriza califican como «campaña del miedo» lanzada por líderes europeos y acreedores de Grecia y por diversas fuerzas políticas griegas favorables al «sí».
En un mensaje televisado en la recta final de la breve campaña, Tsipras hizo referencia al informe publicado ayer por el Fondo Monetario Internacional (FMI) en el que -subrayó el premier- el organismo financiero reconoce que la única solución para Grecia «es una quita del 30%» de su deuda y ofrecer un periodo de gracia «de 20 años», informó la agencia de noticias EFE.
«Solo que esta opción nunca fue planteada por los acreedores (en las negociaciones)», añadió.
Tsipras pidió a la población votar con calma y respetar la opinión contraria durante el proceso de votación.
«El lunes estaremos todos unidos. Los llamo a decir ‘no’ a los ultimátum y chantajes, pero también a decir ‘no’ a la división», repitió.
«Votemos con calma y argumentos, sin reproches», añadió.
Ayer Tsipras había señalado en una entrevista en la TV griega que «cuanto más fuerte sea el ‘no’, mejor será el acuerdo».
Hoy, el presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, salió a responder esas declaraciones y consideró que si los griegos votan a favor del «no» Grecia se verá «radicalmente debilitada».
«Incluso si hay un «sí», deberemos afrontar una negociación difícil», agregó Juncker en una rueda de prensa sobre el inicio de la presidencia rotatoria luxemburguesa de la Unión Europea (UE).
Esta noche está prevista otra intervención de Tsipras en el acto de campaña organizado por su partido Syriza en la plaza de Syntagma a favor del «no», que coincidirá con otro en defensa del «sí» convocado por una plataforma de formaciones, empresas, sindicatos y municipios, y que se celebrará en el antiguo estadio olímpico.
Las últimas encuestas dan un estrecho margen de victoria al «sí», frente al «no», con 44,8% de los ciudadanos que se posicionan a favor de la propuesta de acuerdo presentada por los acreedores, frente al 43,3% que la rechazan. El porcentaje de indecisos alcanza un 11,8%.