El hecho ocurrió en la capital cordobesa. Carlos Córdoba afirma que uniformados fueron cómplices de la banda que lo raptó hace un mes. El hombre fue golpeado y no comió ni bebió en 48 horas.
Daniel, dejate de joder, juntá la guita o tu viejo aparece con dos balazos en la cabeza y te vas a arrepentir.
–Ya te dije, no tenemos esa guita. Está bien: si querés matarlo, hacélo. Pero no te miento. No tenemos esa plata.
Mientras Carlos Córdoba (65) permanecía maniatado, vendado en sus ojos y atado a un inmundo tráiler en un campo de las afueras de la ciudad de Córdoba, en abril último, uno de los cabecillas que comandaba el secuestro extorsivo negociaba con uno de los hijos de la víctima, Daniel Córdoba.
Se trata del secuestro ocurrido entre el viernes 10 de abril y el lunes 13. Casi 72 horas de intensas negociaciones entre la familia y los secuestradores, todo bajo la atenta mirada de la Justicia federal y de los policías de la División Antisecuestros.
Fuente: La Voz