Un fenómeno digno de una película de terror sembró de intriga y espanto a un pueblo australiano en la ciudad de Goulburn cuando una extraña “lluvia de arañas” cayó del cielo.
Miles de pequeñas arañas descendieron sobre esta ciudad de Australia. Los arácnidos rápidamente tejieron mantas blancas que cubrieron los campos de plantaciones despertando el espanto de los habitantes.
La extraña situación podría ser explicada por las lluvias que han afectado esa región y que, según los medios australianos, serían la razón de que las arañas trepen a la cima de los árboles y usen sus telarañas para viajar con las brisas.
¿Cómo hacen para viajar? Tejen sus pequeñas bolsas y el viento las va llevando. El fenómeno se conoce como «balloning» o también como «kitting». Y se la considera una migración masiva incluso a kilómetros de distancia. El asunto es que para los vecinos llueven arañas, en copos. Y esos copos empiezan a cubrir los campos, por eso los habitantes los llaman «cabellos de angel» y al tiempo, campos y árboles empiezan a ser blancos, cubiertos de telarañas.
Las bolsas o copos llevan pequeñas arañas que usa la tela como si fuera un paracaídas y se cree que no son peligrosas si se las toca.