Lo dijo Paola, hermana de Patricia Pappa, la mujer que fue apuñalada y quemada por su ex pareja. Sostuvo que las mujeres «deben animarse a denunciar». El caso fue elevado a juicio y Sambrenil, el homicida, enfrentaría una pena de prisión perpetua. El fiscal desestimó una emoción violenta.
«Hay que animarse a denunciar» Lo dijo Paola, hermana de Patricia Pappa, la mujer que fue apuñalada y quemada por su ex pareja en la cochera de un edificio en calle Lavalle.
En diálogo con Telediario sostuvo que «lo ocurrido le cambió la vida a toda la familia» y destacó: «Las mujeres deben tomar conciencia. La violencia no se da solo con los golpes. Tenemos que animarnos a denunciar, no tener miedo. La sociedad está mal y hay mucha falta de amor».
«No hay motivo, no hay excusa para lo que pasó. El dolor nos cambio la vida. No hubo emoción violenta y mi hermana no lo engañó, fue a la inversa. Esto genera más dolor, que haya intentado ensuciarla», manifestó.
El caso fue elevado a juicio por el fiscal Javier Di Santo y el homicida, Marcelo Sambrenil, enfrentaría una pena de prisión perpetua en caso de ser condenado.
Entrevista a la familia de Patricia y a su abogado tras la elevación a juicio de la causa
Elevación a juicio
El fiscal de Instrucción Javier Di Santo confirmó la elevación a juicio de Marcelo Sambrenil, acusado de homicidio agravado por la relación de pareja y por alevosía, tras el femicidio de su ex pareja Patricia Pappa. El homicida apuñaló y prendió fuego a la mujer en la cochera de un edificio en calle Lavalle.
Según surge de la resolución del fiscal, el 19 de noviembre del 2014, poco antes de las 13:30, Sambrenil, provisto de un cuchillo y de una botella conteniendo un líquido inflamable, los que guardaba en un bolso tipo morra, ingresó utilizando un control remoto a la cochera ubicada en el lado norte del edificio denominado “Ranqueles III”, sito en calle Lavalle nº 553.
«Sabía que al lugar arribaría Patricia Alejandra Pappa, con quien había mantenido una relación de pareja por el transcurso de unos 6 años. Una vez que la mujer llegó hasta donde tenía estacionada su motocicleta, fue sorprendida por Sambrenil, quien con evidente intención homicida se interpuso en su camino asestándole tres profundas cuchilladas a la altura del abdomen, y dos más en su mano izquierda al procurar la mujer defenderse de la agresión», describió.
Añadió el investiador que, «cuando se encontraba caída por el ataque, se presentó en el lugar Matías, el hijo de la víctima, alertado por los gritos de su madre que se escuchaban desde el departamento “c” que ocupaban en el 5to piso del mismo edificio». «Al advertir Sambrenil la presencia del joven, lo acometió con el cuchillo sin llegar a lesionarlo, por lo que Matías se dirigió hacia la salida de la cochera intentando procurarse de un palo u otro elemento para defenderse. Ese instante fue aprovechado por Sambrenil para asegurar la muerte de Patricia Pappa, quien sin capacidad de resistencia por las heridas recibidas yacía en el piso a su merced. Así, actuando sobre seguro, derramó sobre su cuerpo, especialmente en el rostro y parte superior, el líquido combustible que traía e inmediatamente le prendió fuego con un encendedor, produciéndole serias quemaduras en todo su cuerpo», describió el fiscal.
Di Santo precisó que «alcanzado su cometido, y mientras Matías intentaba socorrer a su madre apagando el fuego con sus manos, Sambrenil se retiró del lugar caminando, evadiendo a quienes intentaban detenerlo amedrentándolos con ademanes de extraer una supuesta arma que portaba en el bolso».
«Finalmente fue aprehendido en la intersección de las calles Lavalle y 25 de mayo por la acción de terceros y personal policial que acudió al lugar anoticiado del ilícito. Trasladada Patricia Pappa al Nuevo Hospital San Antonio de Padua, a las pocas horas falleció por Shock mixto hipovolémico y neurogénico debido a quemadura y heridas de arma blanca. En lo que respecta a las quemaduras le interesaron entre el 70 y 80 % de la superficie corporal con asiento predominante en las extremidades superiores e inferiores, tórax, dorso, región cervical, facial y vías respiratorias, mientras que las heridas punzocortantes le afectaron intestino delgado, intestino grueso e hígado y región palmar de la mano izquierda», subrayó.
Di Santo descartó «cualquier posibilidad de que -Sambrenil- hubiera actuado bajo un estado compatible con la emoción violenta, aventando así, como ya se dijera, la versión que intenta introducir el encartado al proceso»