En el inicio del juicio por el crimen de Rubén Cabral, remiseros se concentraron frente a Tribunales y hay un caos de tránsito. Reclaman por el botón antipánico.
En el inicio del juicio por el crimen del remisero Rubén Cabral, quien fue ultimado a balazos en el interior de su auto en un hecho que el fiscal Fernando Moine calificó de robo, remiseros se concentran frente al Palacio de Tribunales.
El proceso se realizará en la Cámara del Crimen y sumará los jurados populares.
Los trabajadores del volante piden Justicia por la muerte del compañero y exigen el cumplimiento de las promesas oficiales para brindar mayor seguridad. Entre los pedidos surge el botón antipánico.
El caso
Por el hecho están imputados Jonathan Ezequiel Busnelli (22) y Micaias Miatello (21). Un tercer implicado pidió la probation.
El hecho ocurrió el 14 de septiembre de 2013, cuando los acusados tomaron el remis de la firma Ya desde el boliche “Roxbury” (en la zona de la rotonda Seminario) hasta la calle Manuelita Rosas al 1450 de barrio Alberdi, donde el chofer recibió dos balazos letales.
Para el fiscal Moine, los imputados le apuntaron a Cabral con un revólver calibre 32 le sacaron la llave del auto y la ticketera. En medio del asalto, el remisero se habría resistido y Busnelli le habría efectuado dos disparos en el cráneo. Después del vuelco de los acontecimientos, los atacantes se dieron a la fuga de inmediato.
Los autores fueron rápidamente identificados porque en el interior del auto se halló una billetera con documentación a nombre de Busnelli y una mochila en cuyo interior se hallaron una notebook, una tablet y varias conexiones que se utilizan para pasar música en locales bailables. Esas pertenencias serían de Busnelli, quien trabaja como disc jockey.
Por el hecho también está involucrado Jonathan Nahuel Abraham quien habría ayudado a los imputados a ocultar el arma de fuego y la llave del remís.