Lo dijo Dillon tras el triunfo de Estudiantes sobre Atenas. Por su parte, Dopazo, autor del gol y protagonista de una semana clave, resaltó: «Encontrar el gol en la última jugada tiene un sabor muy importante».
Tras la victoria por uno a cero sobre Atenas, el entrenador de Estudiantes, Ricardo Dillon, manifestó que «estos tres puntos sirven mucho».
«En el segundo tiempo no encontrábamos el camino y pusimos el corazón. Atenas fue muy inteligente, jugo bien, pero nosotros apostamos y tuvimos el premio», enfatizó.
En relación al cruce con el utilero de Atenas, Dillon dijo que todo surgió porque pidió que el ayudante de campo del alba «no ingresara a la cancha». «Vino a insultarme y nos pegamos un par de empujones, para mi terminó ahí», relató.
El técnico sostuvo que Martín Dopazo «tiene que convencerse que en la continuidad va a ser un jugador muy importante y superar esas lagunas».
Por su parte Dopazo, autor del gol, remarcó que se encontraba «muy feliz».
«Encontrar el gol en la última jugada tiene un sabor muy importante. Sabíamos que teníamos que ganar de local. Ahora se nos viene una final en Villa María, pero vamos por el buen camino», aseveró.