Desde marzo, el número de casos registrados de ébola ascendió a 1.201 casos, con 672 muertes en Guinea, Liberia y Sierra Leona.
El virus mortal del ébola se puede expandir como un fuego forestal. Esa fue la metáfora que eligió el gobierno de Estados Unidos para calificar el peligroso avance de la enfermedad en África Occidental, en la mayor epidemia de este mal de la historia.
Desde marzo, el número de casos registrados de ébola ascendió a 1.201 casos, con 672 muertes en Guinea, Liberia y Sierra Leona.
Dos norteamericanos, un doctor y una misionera, contrajeron en virus en Monrovia, Liberia, con síntomas de fiebre, dolores en las articulaciones, diarrea, vómitos y hemorragias.
«La posibilidad de que esta epidemia se extienda más allá de África Occidental es muy baja, pero la situación cambia rápidamente y debemos estar preparados para la muy remota posibilidad» de que una persona infectada viaje y traiga la enfermedad a los Estados Unidos, admitió Stephan Monroe, vice director del Centro Nacional de Enfermedades Infeccionas y Emergentes del Centro de Prevención y Control de Enfermedades (CDC)