Luego de ser arrestado, un hombre pidió permiso para hacer una llamada telefónica y aprovechó para jugar una broma al policía que lo detuvo.
Un hombre de Kentucky, quien fue arrestado bajo los cargos de intoxicación pública, decidió hacerle una broma a la Policía para reír un rato.
Michael Harp, de 29 años de edad, solicitó permiso para hacer una llamada con su teléfono celular, entonces marcó al número de un Domino’s Pizza e hizo un pedido a domicilio a nombre del oficial que lo detuvo.
La pizza llegó calentita antes de 30 minutos a la estación de Policía donde Harp se encontraba detenido. El repartidor informó que tenía un pedido para el oficial Wilson, quien arrestó al drogadicto. Los agentes indicaron que nadie había pedido una pizza.
Finalmente, tras rastrear la llamada, descubrieron que el pedido se hizo desde el celular de Harp. Él detenido lo negó todo.
Harp asegura que él no pidió la pizza, advierte que en el momento que se hizo el pedido había más de diez personas en su celda y que pudo ser cualquiera, además dijo que a él ni le gusta el tradicional platillo de origen italiano.
Como sea, ahora Michael Harp además de enfrentar los cargos de intoxicación pública, tendrá que responder por otros como robo de identidad, engaño y hacerse pasar por un agente de Policía, todo por un pedazo de pizza.