La gente está muriendo o quedando herida, pero también están siendo forzados a huir. Naciones Unidas afirmó que el número de desplazados por las acciones de Israel se duplicó en una sola noche: pasó de 20.000 a 40.000.
La nueva fase de operaciones de Israel contra Gaza trajo consigo una nueva ola de víctimas fatales. El hospital de Shifa es el escenario de estallidos de dolor. «Mataron a mis dos sobrinas», se lamenta un hombre. «¡Las hijas de mi hermano! ¡Las hijas de mi hermano!», enfatizó.
Según relata el sitio de la BBC, cerca del hombre, Amar Dawoud vigila a su hija de cinco años, Rawiya, quien permanece inmóvil sobre la cama con una mano fracturada y, posiblemente, un trauma en el cráneo.
Dawoud relata que al menos 70 personas buscaron refugio en su casa antes de que fuera impactada por un misil. «Todos ellos estaban buscando refugio», dice. «Y luego nos bombardearon».
La gente está muriendo o quedando herida, pero también están siendo forzados a huir. Naciones Unidas afirmó que el número de desplazados por las acciones de Israel se duplicó en una sola noche: pasó de 20.000 a 40.000.
El Wafa ha sido atacado varias veces durante la semana pasada. Está cerca de la frontera y muy al alcance de las actividades militares israelíes.
Basman al Ashi, director del hospital, recuerda que el jueves en la noche todo parecía tranquilo hasta que de repente comenzó un intenso bombardeo antes del ingreso de las tropas a la Franja de Gaza.