Argentina cayó 23 a 17 en Tucumán y no se pudo tomar revancha ante el campeón del Seis Naciones.
Ni la revancha pudo ser. Los Pumas volvieron a perder ante Irlanda, esta vez por 23 a 17, en el estadio José Fierro de Atlético de Tucumán. Y se quedaron con las ganas de festejar en el que fue el segundo test de la ventana de junio. El equipo de Daniel Hourcade, plagado de jugadores de Los Pampas, cumplió un digno papel. Por su coraje y garra, evitó recibir una paliza del campeón del Seis Naciones, que usufructuó al máximo los errores del conjunto argentino. Y que tuvo a un finísimo Jonathan Sexton que, cuando Argentina estaba en partido, aportó 11 puntos gracias a su pegada.
Había arrancado desbalanceado el primer tiempo, porque los irlandeses, que llegaban con todas sus figuras, poco a poco empezaban a imponer su juego físico y dinámico. Los Pumas, que no se quedaban atrás, resistían como podían a pura infracción. En ese contexto, Irlanda pasó al frente en el marcador por 6 a 0 gracias a dos penales de su apertura Jonathan Sexton. Pero, en la segunda mitad de la primera parte, Argentina empezó a dañar el muro irlandés. Los dos, por un momento, jugaron con 14, por la amarillas que recibieron Matías Cortese y Andrew Trimble, que le metió un tackle sin pelota a Manuel Montero. A partir de ahí, Los Pumas empezaron a cambiar su imagen.