El equipo de Julio Velasco se impuso por 3-1 en Komaki. Pereyra fue el máximo anotador, con 19 puntos en el mundial de Vóleibol.
En números, la misión se cumplió. Argentina le ganó a Japón nuevamente, en su segundo enfrentamiento en esta ciudad de Komaki, donde las edificaciones modernas como este estadio se mezclan con las casas bajitas, tejadas y con plantaciones de arroz en lugar de patios. Fue 3 a 1 en una actuación que ofreció matices diferentes a la del sábado. Por un lado, se evidenció mayor juego en equipo; por el otro -y en contrapartida a la mejora vista en los dos últimos sets del primer partido-, se volvieron a cometer muchos errores que hoy, incluso, le permitieron a los locales llevarse el tercer parcial.
Fue un buen partido de De Cecco, haciendo jugar no sólo al opuesto, Facundo Pereyra, sino también a los puntas (Filardi y Ocampo) y además aportando en el servicio y hasta en el bloqueo, sin dejar de mencionar algunas intervenciones (como una dejada tras amagar el levantamiento) de vóley champagne.
Ante un rival débil, que no ofreció nunca demasiadas alternativas en su juego, Argentina sumó sus primeros errores en la recepción. En ese aspecto se destacó el cordobés Sebastián Garrocq. El líbero detuvo varias pelotas complejas y las supo acomodar para que Argentina las jugara con mayor comodidad. Un buen cierre de Javier Filardi fue suficiente para que los de Julio Velasco se llevaran el primer set por 25-21.
Tras un comienzo de segunda manga parejo, Argentina comenzó a mandar gracias a su ataque. De Cecco usó todo el ancho de la cancha para que fuesen sumando Pereyra, Solé, Ramos y Ocampo. Un par de pelotas recuperadas estupendamente por De Cecco más algunos errores de Japón en momentos decisivos derivaron en la victoria visitante por 25-19 en el segundo set.
Todo parecía encaminarse a otro cómodo 3 a 0, pero en el tercer parcial aparecieron todos los errores que tanto preocupan al cuerpo técnico. Hubo once errores, entre fallos propios del juego e infracciones marcadas por los árbitros, que prácticamente le entregaron el set a los japoneses. Aún así, las limitaciones de los asiáticos permitieron que Argentina se recuperara y casi remontara el set, que los locales se llevaron por 25-23.
En el cuarto set, tras un parcial de 8-6, Argentina hizo la diferencia con el saque y se alejó hasta el 14-6. Luego fue cuestión de mantener la ventaja con el ataque y resolver a favor un partido que debió durar mucho menos. La victoria, en definitiva, fue apenas un paso estadístico en la conformación del grupo que busca Velasco.