La estudiante, de 14 años, declaró ante la Justicia que el padre la buscó en su auto a la salida de un colegio céntrico y que la llevó por la fuerza hacia un descampado para perpetrar el hecho, publicó hoy el diario «El Liberal».
SANTIAGO DEL ESTERO.- “Callate, o no vas a volver a ver más a tu madre y a tu hermano; y la vas a pasar peor…” . Estas son -según la denuncia de de una adolescente santiagueña- las palabras que le dijo su propio padre después de violarla, con la ayuda de otros dos hombres.
La estudiante, de 14 años, declaró ante la Justicia que el padre la buscó en su auto a la salida de un colegio céntrico y que la llevó por la fuerza hacia un descampado para perpetrar el hecho, publicó hoy el diario «El Liberal».
La investigación está a cargo de la jueza Lucrecia Martínez Llanos. Según la denuncia, el abuso ocurrió el 5 de marzo, primer día de clases, pero la víctima se lo contó a su madre, en las últimas horas, aterrorizada ante la posibilidad de que ocurra de nuevo.
El acusado es un hombre de 46 años, empleado público, quien siete años atrás se separó de su concubina, tras 11 años de convivencia. Tal cual solía hacerlo con muchas intermitencias, después de un largo tiempo el 5 de marzo el sujeto pasó por la escuela a la que asiste su hija, de 14 años.
Llegó a la siesta y en un automóvil oscuro y con vidrios polarizados. “¿Quieres tomar una gaseosa?”, le dijo a su hija, según la denuncia. El hombre abrió la puerta del rodado y la obligó a ingresar al coche, donde había otros dos hombres, con la cara cubierta, y partió. Al llegar a una zona montuosa, y mientras los hombres inmovilizaban a la menor, el padre ultrajaba a la propia hija, añade la denuncia originalmente interpuesta en la Comisaría del Menor y la Mujer.
La chica volvió a su casa, pero no le dijo nada a su madre, hasta que llegó un SMS a su celular: “No cuentes nada. Te buscaré de nuevo…”