El cortejo fúnebre de las víctimas fatales del incendio arribó al cementerio de la Chacarita. El arzobispo Mario Poli ofreció un responso antes de la inhumación.
El cortejo con los restos de los bomberos muertos el miércoles en el incendio que se produjo en el depósito de Barracas arribó este jueves por la tarde al cementerio de la Chacarita. Allí, el arzobispo Mario Poli ofeció un responso antes de la inhumación de los restos.
Luego del sonar de sirenas y en un cerrado aplauso, los coches fúnebres y vehículos con familiares de los fallecidos partieron del edificio policial, ubicado en avenida Belgrano al 1500, acompañados de una guardia de tránsito en motos y personal de la dotación 101 y 102 de bomberos y otros móviles policiales.
El cortejo partió hacia el cementerio, en medio de aplausos y escenas de dolor de familiares y amigos de las víctimas. Lo escoltó un autobomba con ofrendas florales escolta el cortejo, que partió desde el Cuartel Central de la Policía Federal.