Las viejas postales lo muestran con un perfil europeo que distinguía a la ciudad. La actualidad, lo deja envuelto en una polémica sin fin.
«Angustias de sentirme abandonado…» Los más nostálgicos recuerdan los tiempos en que el Parue Sarmiento se distinguía con su perfil europeo como uno de los espacios naturales más importantes de la ciudad. Hoy, la polémica sobre la falta de inversión y el cuestionado proyecto para donarlo a la provincia, suman preocupación y debate.
El parque Sarmiento nació por el año 1923, durante la intendencia de Vicente Mójica y en sus inicios se desarrollaron hasta con canchas de tenis. El anfiteatro, el lago o el rosedal fueron postales distintivas del lugar.
Hasta comienzos del siglo pasado funcionaba en el espacio el vivero municipal, lo que generaba una amplia variedad de flora.
El terreno había sido cedido al municipio por los hermanos José Antonio y José Mariano Cabral y en 1883, desde la Municipalidad se le encargó al ingeniero municipal Eduardo de Saint Remy Urban la delineación y mesura de la villa.
En 1926, desde el ministerio de Obras Públicas de la Provincia se le otorgó a la Municipalidad de nuestra ciudad un subsidio de $30 mil que sería destinado para mejorar las instalaciones del paseo en Banda Norte.
Con el dinero otorgado se construyó la portada del parque, que más tarde sería parte de una controversial historia y que fue realizada por Jacinto Emiliani. Además, se compró un tren que funcionó durante muchos años como juego de los riocuartenses, compuesto por una pequeña locomotora y cinco vagones.
La mirada de los riocuartenses
Quienes transitan habitualmente por el lugar advierten que hubo arreglos del parquizado y el equipamiento, aunque piden “cambios estructurales”.
Uno de los consultados señaló que desde hace 10 años realiza habituales caminatas por el lugar y consideró que el parque “necesita una inversión importante”
“Hay que determinar para que se utiliza el parque y a partir de allí, definir que inversión se va a realizar y que mejores se deben efectuar. Aquí hay personas realizando tareas, pero no alcanza. Es una lavadita de cara”, opinó.
El vecino sostuvo que “la gente llegaría mucho más si las condiciones fueran otras”.
Otro de los consultados, admitió que “hubo arreglos y se produjo la pintura de juegos y el Anfiteatro”, aunque cuestionó “que algunos realicen roturas intencionales”.
Una pareja frente al lago destacó la presencia de personal municipal, pero apuntó “al vandalismo y la falta de inversión”
“Hay que poner más policías, más gente que cuide. La seguridad es fundamental”, opinó.
Por su parte, la mujer fue más crítica y exigió “que se recuperen las plantas y los espacios florecidos”.
“Es cierto que la gente no cuida nada, pero hay que hacer mejoras. Este lugar es hermoso y tenemos que protegerlo entre todos”, aseveró.
Rechazo
Osvaldo Da Costa y Eduardo Scoppa también rechazaron la propuesta de “donar” el Parque Sarmiento a la Provincia, como impulsó el presidente del bloque de Unión por Córdoba, Guillermo Natali.
Da Costa señaló que comparte el diagnóstico sobre el déficit en el Parque Sarmiento, al señalar que “ha sido prácticamente abandonado a su suerte”.
“En los últimos meses, la colocación de algunos juegos infantiles, la poda de unos pocos árboles y, en especial, la “limpieza de cara” del Anfiteatro, fueron pequeños gestos del Ejecutivo, que no alcanzan para ponerlo en valor”, opinó.
Para el concejal kirchnerista, “la iluminación, por falta de conservación, es tenebrosa y el lago se presenta como un estanque inerte, luego de que toda su fauna ictícola desapareciera en buena medida por la falta de oxigenación del agua”.
Sin embargo, Da Costa aclaró que “esta necesidad de que la ciudad recupere plenamente uno de sus principales espacios verdes no nos habilita a “regalarle” la jurisdicción a la provincia”.
“Entiendo que Guillermo Natali está haciéndose cargo de una promesa del gobernador efectuada en el marco de nuestra campaña. Me parece bien: el gobernador dijo que “ganare quien ganare” la elección municipal, él asumía el compromiso de techar el Anfiteatro del Parque. De alguna manera, los concejales de UPC-FPV somos garantes de ese compromiso público. Pero nunca se habló de “ceder juisdicción”. El Anfiteatro es un lugar que atesora muchos gratos recuerdos para Río Cuarto, desde aquel campeonato provincial de básquetbol en el que brilló el flaco Filloy en la década del 70. En todo caso, se puede articular una explotación común como se ha logrado con varios espacios entre la Fundación por la Cultura y el área que coordina –y muy bien- el profe Sassatelli”, argumentó.
Por su parte, Scoppa expresó que “al patrimonio de los riocuartenses no se lo podemos entregar a un gobierno que sólo hacer marketing con lo que quiere”
El edil admitió en diálogo con FM Gospel que Natali “puso sobre la agenda el estado de situación del Parque Sarmiento”.
No obstante dijo que no comparte la cuestión de fondo ya que la solución no radica en pasar el espacio verde a manos de la Provincia.
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