El hombre imputado por abuso sexual y denunciado en su libro por el artista Diego Fernández, fue indagado esta mañana por el fiscal Moine.
El entrenador de fútbol infantil sospechado de abuso sexual contra un joven -quien denunció públicamente el hecho en un libro-, fue indagado esta mañana por el fiscal Fernando Moine imputado por otro hecho de tocamiento a otro niño de 11 años.
Así lo confirmó a TD Digital el doctor Pablo Romero, abogado del acusado, quien destacó que el entrenador «negó el hecho y respondió las preguntas del fiscal».
Moine había anticipado el pasado viernes que el acusado está imputado de abuso sexual agravado por la condición de encargado de la guarda, por su rol de entrenador de fútbol infantil.
Según señaló «la denuncia implica un tocamiento y el niño no sufrió lesiones físicas».
La críatura tenía 11 años cuando ocurrió el hecho, hace dos años. Durante la instrucción, se realizó la Cámara Gesell, pericias psicológica y psiquiátrica y se sumaron testimonios.
Moine adelantó que la causa «está muy avanzada y probablemente surja una resolución en el corto plazo».
El hecho no interrumpiría el caso de Diego Fernández, que ya estaría prescripto.
Ante el fiscal
El abogado del entrenador de fútbol infantil denunciado por presunto abuso sexual anticipó a Telediario que se presentó espontáneamente la semana pasada ante el fiscal Javier Di Santo “para ponerse a disposición”.
Sin embargo, no estuvo acompañado por el presunto implicado “para evitar la exposición mediática”
El doctor Pablo Romero aseguró que “no existe imputación y por el tiempo transcurrido el caso estaría prescripto”, aunque destacó que “el conocimiento público sobre el caso implica, en nuestra consideración, una persecución penal”.
Añadió que requirió “que permanezca en libertad si surgiera una eventual imputación”
El joven que denunció los aberrantes hechos, Diego Fernández, presentó su libro ante más de 300 personas, que colmaron el salón de la Sociedad Española.
En la fiscalía del doctor Javier Di Santo siguen analizando los expedientes judiciales y esperan los informes del Registro Nacional de Antecedentes y la Policía para determinar si existen otras causas que frenen la prescripción.
“Que denuncien”
Diego Fernández, quien denunció haber sido víctima de abuso sexual, llamó a otras posibles víctimas a denunciar sus casos y evitar así que la causa prescriba.
En diálogo con Telediario, Diego dijo que está convencido de que hay otras personas afectadas por lo ocurrido.
Tras denunciar que fue víctima de abuso sexual durante su niñez, el artista y profesor, llamó a otras posibles víctimas del pedófilo del pasaje Aristóbulo del Valle a efectuar las denuncias por sus casos, y así evitar que la causa prescriba.
“Denuncien, no tengan miedo, éste es el momento”, expresó Fernández.
El joven teme que su caso quede impune por una eventual prescripción del hecho. El máximo de tiempo que permite la causa es de 12 años. Cuando se trata de menores de edad, según la ley 26705, aprobada el 5 de octubre de 2011, el periodo comienza a transcurrir en la medianoche del día en que la víctima asumió la mayoría de edad. Aunque en este caso, Diego tiene ya 35 años.
Los episodios habrían ocurrido entre los años 1985 y 1986, cuando el denunciante tenía entre 8 y 9 años.
El fiscal a cargo de la investigación, Javier Di Santo, precisó a TD Digital que aún no resolvió si la causa está prescripta y precisó que se están investigando los antecedentes penales que pudiera tener el sospechoso.
“Por el tiempo transcurrido, podría evaluarse la prescripción pero si existieran nuevos hechos, estos podrían ó no interrumpirla el cese de la investigación. Estamos analizando si esta persona tienen algún otro tipo de antecedente penal computable en la departamental local y en el registro nacional de reincidentes, división prontuarios”, manifestó.
El hombre sospechado D.A. no está imputado en la causa, a pesar de que transcurrieron dos años de la denuncia.
Publicación
La víctima escribió un libro en el que narra lo ocurrido y advierte a la sociedad sobre el pedófilo.
“En el 2011 cuando hice la denuncia lo vi muy impunemente, disfrutando de su libertad. Cruzaba la calle de la mano de niños y eso me golpeó muchísimo. Decidí jugarme y denunciar el caso”, expresó.
Diego dijo que fue clave el apoyo de su familia y amigos para develar lo ocurrido.
“Me dio fuerzas para alertar a la gente, sobre todo el barrio y la ciudad”, precisó.
El joven, quien es docente y artista plástico, destacó que el abusador es entrenador de fútbol infantil.
“Ese era un anzuelo para él. Los convencía, porque tiene mucha llegada con los vecinos y las familias. Te invita a la casa, nos hacía ver películas pornográficas, cerraba las puertas y abusaba de los chicos”, relató en diálogo con Telediario.
Diego expresó que en el momento en que sufrió los abusos, “ni siquiera sabía de que se trataba”.
“El miedo y la verguenza hicieron que no denunciara. El tiempo pasa, los casos prescriben y estas personas quedan impunes. Lo que hizo fue asqueroso”, aseveró.
Añadió que “es necesario que otras víctimas se animen a contar para que este depravado, esta bestia no siga abusando”.
“Este hombre sigue en contacto con niños, enseñando fútbol y la Justicia debe actuar”, subrayó.