El ex juez español Baltasar Garzón remarcó la necesidad de democratizar la justicia y aseguró que “los jueces deben ser elegidos por el pueblo, así como elegimos a los presidentes, a los representantes y a los demás gobernantes”.
Garzón formuló declaraciones durante una jornada en memoria del estudiante Miguel Bru, ocurrida hace 20 años, que se desarrolló en la Facultad de Periodismo y Comunicación en La Plata.
“Algo falla cuando el sistema de justicia no funciona”, expresó y consideró que “si se administra la justicia en nombre del pueblo ¿por qué los jueces se oponen al control de transparencia que existe para toda la administración?”.
“Cuando la justicia pierde todo punto de conexión con la sociedad, se vuelve injusta”, reflexionó y opinó que “la justicia debe ser transparente y estar controlada”.
Pidió “que haya normas de control externas sobre la justicia, que la gestión de jueces sea clara y transparente, y eso nos dará tranquilidad”.
“Habrá fracasos o fallas a veces porque quienes aplican las leyes son hombres y mujeres, pero habrá un escenario donde todos verán cómo se desarrolla la escena”, continuó y añadió que “actuar en una justicia de bambalinas a escondidas del público lleva a la injusticia, a la arbitrariedad y al sectarismo”.
Garzón además analizó que “si se eligieran a los jueces popularmente, habría una justicia democrática y participativa” y se preguntó “¿O acaso los ciudadanos no estarán interesados en una justicia independiente?”.
Planteó también que “la justicia como corporación es un poder en el mundo alejado de la sociedad y se transforma en ciega, sorda y muda”.
“Cuando el sistema judicial funciona da tranquilidad. Si los jueces se alejan de la sociedad, se genera riesgo de arbitrariedad. Los jueces, para ser justos y ecuánimes, deben estar cerca d la sociedad”, finalizó.