Ayer, hubo interrupciones de varias horas y se resintió el servicio público.
Durante la mañana se normalizó la venta de GNC en las estaciones de servicio de la ciudad, tras el corte que se extendió durante toda la tarde, aunque al mediodía se observaron largas colas frente a las estaciones por temor a que se repita la problemática.
La medida de ayer provocó una fuerte merma en los servicios de taxis y remises, debido a que los choferes desistieron de trabajar a nafta.
Los empresarios admiten que no se puede garantizar que durante la tarde de hoy no se vuelvan a producir interrupciones en la presión de GNC.
Hasta las 17 de ayer, solo se podía acceder al combustible en dos estaciones: las ubicadas frente al Mercado de Abasto y en la localidad de Las Higueras.
Durante la siesta hubo largas colas de taxis y remises para adquirir el GNC y entre los conductores se advertía un marcado malestar por las demoras.
«Nosotros no podemos funcionar a nafta porque no te cierran los números, sino cargamos GNC tenemos que parar el vehículo», destacó uno de las afectados.
Otro remisero manifestó que «hay que recorrer toda la ciudad para cargar el tanque, se pierde mucho tiempo, viajes y dinero».
En la cola de vehículos de la estación frente al Mercado de Abasto, un trabajador del volante subrayó que «desde el mediodía empezaron a cerrar todos los surtidores y fue necesario cargar nafta para no quedarse a pie».
Inicialmente, se preveían cortes en las estaciones con contratos interrumpibles, aunque la situación hoy se extendió a todas las expendedoras.
Incluso, los empresarios no descartan que los cortes se repitan en los próximos días.