En Colombia 40 mujeres de bajos recursos quedaron embarazadas después de haber sido estafadas con la venta de pastillas anticonceptivas que, en realidad, no funcionaban. La fiscalía acusó de corrupción al intermediario que las comercializó.
Fernando Sanabria Rincón fue el vendedor de las pastillas que, supuestamente, serían encargadas de prevenir el embarazo. Sanabria Rincón era, en realidad, parte de una amplia red que trabajaba vendiendo medicamentos en el mercado negro en varias ciudades del país latinoamericano.
Las pastillas, que supuestamente se trataban de una marca llamada Nofertyl, fue comercializada con cientos de mujeres que, mayormente, eran de bajo recursos.
La entidad judicial dictó cargos por corrupción contra Sanabria Rincón, que se trata del principal responsable del embarazo de 40 mujeres.