Luego de estar una semana prófugo de la Justicia, Ricardo Jaime se presentó esta mañana en los tribunales de Córdoba para fijar domicilio en una causa en la que se lo investiga por tentativa de sustracción de medios de prueba.
Jaime llegó acompañado de su abogado Marcelo Brito, estuvo unos minutos en el juzgado y, antes de retirarse, mantuvo un breve diálogo con radio Cadena3.
Allí, Jaime dijo ser una persona que se ajusta a derecho y que a partir de ahora estará dispuesto a cumplir «lo que disponga la Justicia».
«No existen esas 20 causas en las que se me hace referencia», indicó en relación a los argumentos del fallo del juez Claudio Bonadio, que ordenó su detención el viernes 12 de julio. «Son 7 las causas que están en trámite», sostuvo.
En la breve entrevista, Jaime negó sentirse un perseguido político y consideró que son «burdos comentarios» las palabras de quienes dicen que tiene secretos del kirchnerismo que amenaza revelar. «Soy un militante político y dejo que la Justicia actúe libremente, como debe ser», señaló.
Consultado sobre dónde estuvo durante la semana pasada, cuando lo buscaba la Policía, el ex secretario de Transporte indicó que «no corresponde que lo diga». Sin embargo, uno de sus abogados indicó esta mañana que había estado en la provincia de Córdoba y en la Capital Federal.
El viernes, luego de pagar una fianza de $200 mil y bajo compromiso de presentarse en los tribunales cada vez que sea requerido, el ex secretario de Transporte fue beneficiado con la eximición de prisión.
Su abogado de la Capital Federal, Andrés Marutian, había adelantado en la primera mañana que su defendido se iba a presentar hoy en Córdoba y el próximo lunes hará lo propio en Comodoro Py.
La semana pasada, el ex secretario de Transporte, Ricardo Jaime, fue beneficiado por dos fallos que le otorgaron la eximición de prisión. El viernes 12 se había ordenado su detención por una causa de sobreprecios y días después un tribunal de Córdoba había hecho lo propio por un delito menor.
La medida de Córdoba se dictó como consecuencia de la orden de captura emitida en Buenos Aires, por el juez federal Claudio Bonadio. La Cámara Federal benefició a Jaime de la orden emitida en la Capital y un día después hizo lo propio la justicia cordobesa.