La videocolonoscopía es un estudio importante, que se recomienda de manera rutinaria a los adultos de más 50 años o más como parte de programas de detección del cáncer colorrectal. En Argentina, según datos del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires, entre el 20 y 30% de los estudios detectan lesiones y pólipos.
Durante décadas, fue un estudio con mala fama: doloroso, incómodo, rodeado de pudores. Hoy se hace con sedación, sin molestias y de manera ambularia. Lo cubren las prepagas y obras sociales.
El estudio
La colonoscopía es un estudio que se realiza con un tubo flexible, que se introduce por el ano y se lo hace avanzar a través del recto y el colon hasta llegar a la unión del colon con el intestino delgado. El colonoscopio tiene una luz en la punta y una lente o cámara que permite que las imágenes se vean en un monitor de video (videocolonoscopía).
La colonoscopía permite visualizar toda la mucosa (revestimiento interno) del colon (intestino grueso) para descartar anormalidades. Es un estudio recomendado para detectar cáncer colorrectal. Se la suele indicar para evaluar síntomas como dolor abdominal, sangrado o diarrea crónica, y de manera preventiva, a modo de screening, luego de los 50 años (si hay antecedentes se puede hacer a partir de los 40 años).
Signos de alerta
Más allá del screening de rutina, es importante consultar al médico ante determinados síntomas: la presencia de sangre al defecar es el más importante. También, el cambio de hábito intestinal y la anemia por déficit de hierro. En general, los sangrados ocasionales están asociados a algún episodio de estreñimiento o a hemorroides internas, pero es el médico el que debe confirmarlo. Ningún sangrado es «normal»: es clave ir al médico.
Preparación previa
La realización de una videocolonoscopía requiere preparación previa. La misma varía de acuerdo a cada paciente: es el endoscopista quien indicará qué hacer. Normalmente, el colon alberga materia fecal, por lo cual debe estar perfectamente limpio para que su cara interna pueda ser examinada en forma completa y puedan ser diagnosticadas las lesiones pequeñas.
¿La colonoscopía puede tener complicaciones?
La colonoscopía es un procedimiento seguro cuando es realizada por médicos endoscopistas entrenados y con experiencia. Igualmente, aunque el índice de complicaciones graves es mínimo (se calcula 1 de cada 1000 colonoscopías), es un procedimiento que no está exento de las mismas. La complicación más grave es la perforación o desgarro de la pared del colon, que puede requerir cirugía para su resolución.
Otra de las complicaciones es el sangrado, en el sitio de una biopsia o luego de una polipectomía. Habitualmente es mínimo y cesa en forma espontánea. A veces requiere control con colonoscopía para detener el sangrado o seguimiento médico.
También pueden haber, aunque más raramente, reacciones adversas a los medicamentos utilizados para la sedación anestésica.
Para detectar las complicaciones luego de una colonoscopía es importante que el paciente se retire del estudio con pautas de alarma: dolor abdominal severo, fiebre y escalofríos, sangrado rectar, mareos, taquicardia. El sangrado luego de una polipectomía puede aparecer luego de varios días. Lo más importante es detectar las complicaciones lo más precozmente posible.
¿Cada cuánto son los controles?
«Cuando no se encuentra patología se recomienda la realización de una VCC con un intervalo de 5 a 7 años y algunos autores lo extienden a 10. Si no existieran alteraciones se interrumpen los controles a los 75 años. En los casos en que existiera alguna patología o se realizara terapeútica, los intervalos de control difieren según la misma y deben ser dados por el médico especialista tratante», explica el doctor Dávalos.
El doctor Dávalos subraya que, «si bien existen múltiples métodos diagnósticos para el estudio de la patología colónica, hoy la videocolonoscopía es el único que permite realizar el diagnóstico (macro y microscópico por biopsias que se pueden tomar de la mucosa) y la terapéutica (resección de pólipos, mucosectomía, tratamiento de lesiones sangrantes,etc) en un mismo acto médico, cuando las condiciones de trabajo son adecuadas».
Fuente Clarín