Ailén Bechara tiene 23 años y llegó a la capital desde su pueblo de origen Derragueira, para trabajar en televisión. Fue así, como modelaje de por medio, consiguió que la eligieran en un casting para trabajar junto a Guido Kaczka.
Pese a ser muy bonita, la «azafata» de A todo o nada, confesó que pasó por el quirófano para agrandarse el busto, aunque la naturaleza le había dado un buen tamaño.
«Las tetas hechas suman en televisión. Ni dudé hacérmelas», dijo a Pronto muy segura de su decisión.