Héctor Connill, jefe de Defensa Civil, destacó que las condiciones actuales «permiten un control de los locales». «El problema es que Dios nos da las ollas pero no las tapa y nunca es posible alcanzar un riesgo cero», argumentó.
«No me convence mucho la palabra prohibición», remarcó Héctor Connill, jefe de Defensa Civil, al ser consultado sobre la ordenanza que impide la venta de pirotecnia a particulares.
Connill manifestó en diálogo con FM Gospel que ve «algo complicada» la efectividad de la normativa, que aún no fue promulgada ó vetada por el intendente Juan Jure.
El funcionario destacó que las condiciones actuales «permiten un control de los locales» y remarcó que si se prohíbe «el usuario podría buscarla en otra parte».
«Se necesitaría mucha gente para poder controlar que no haya venta ilegal», expresó.
Al ser consultado sobre que le recomendaría a Jure, Connill dijo que tiene «opiniones encontradas» porque «siempre que se pueda impedir el riesgo de accidentes está bien».
«El problema es que Dios nos da las ollas pero no las tapa y nunca es posible alcanzar un riesgo cero», argumentó.