Una cuestión “pasional” o problemas con la “clientela” podrían haber sido los desencadenantes de un macabro crimen en pleno centro cordobés, en el que un hombre de alrededor de 60 años fue descuartizado. Por el hecho hasta anoche había dos detenidos.
El dantesco episodio ocurrió en la madrugada de ayer en un domicilio de la primera cuadra de la calle Paraná, lugar en el que un curioso taxista observó que dos personas salían con una pesada bolsa de residuos. Esta situación llamó la atención al chofer que alertó a la Policía.
En la cuadra, y en horas de la madrugada, era habitual ver el movimiento de trabajadoras sexuales, principalmente travestis.
En ese lugar funcionaba un kiosco, que lo atendía una travesti conocida como “Daniela”. Algunos comentaban que además de golosinas o gasesosas se vendía “amor”, otros dejaban entrever que también se podía conseguir droga.
Lo concreto es que cuando los uniformados llegaron al kiosco creyendo que estaban robando, se encontraron con la travesti de unos 30 años y un hombre de 56 sacando una bolsa de consorcio en cuyo interior, además de residuos, estaba el torso y la cabeza de un cuerpo humano.
Fuente: La Mañana de Córdoba