El testigo de identidad reservada del Caso Candela -la niña de 11 años asesinada en agosto de 2011 en la localidad bonaerense de Hurlingham- que había sufrido graves quemaduras tras una explosión e incendio en su casa de Moreno murió esta tarde en el hospital local donde estaba internado.
Fuentes judiciales informaron a Télam que la víctima falleció a raíz de quemaduras en el 80 por ciento de su cuerpo y antes de que los médicos pudieran trasladarlo al Hospital del Quemado porteño.