Fuentes policiales de Texas, en los Estados Unidos, confirmaron la explosión -en principio, accidental- de una fábrica de fertilizantes, ubicada en la pequeña localidad de West, alrededor de las 20:00, hora local (1:00 GMT). El sargento Patrick Swanton, de la policía de Waco, señaló en una conferencia de prensa que hay «entre cinco y 15» víctimas fatales. También se refirió al estado en que quedaron las viviendas de West: «Es una población que pasará mucho tiempo en modo de reconstrucción», lamentó. La onda expansiva de la explosión provocó el derrumbe de una cantidad no determinada de casas. La potencia del estallido generó una medición equivalente a un terremoto de 2,5 grados, explicó Swanton. «La devastación cambia de casa en casa, de cuadra en cuadra», señaló el oficial. Los gases tóxicos emanados por la explosión y uno de los tanques intactos de la planta productora preocupan a los agentes de seguridad. Un testigo de la explosión, Bill Bohannan, que en ese momento estaba de visita en casa de sus padres, cerca de la planta, dijo al diario que la explosión fue «devastadora». Vecinos de la zona confirmaron que la onda expansiva alcanzó casi seis cuadras a la redonda. Habría entre 50 y 75 casas detruídas. Los bomberos temen que el número de víctimas pueda elevarse a decenas de muertos, informó el doctor George Smith, director del Sistema de Gestión de Emergencias de la ciudad, según consignó la cadena CNN. «Ésa es una cifra muy dura, no sabemos todavía. Tenemos dos profesionales del Sistema de Emergencia que están muertos, a ciencia cierta, y puede haber otros tres bomberos que estén muertos». El alcalde de la localidad, Tommy Muska, aseguró: «Hay un montón de gente que se lesionó. Hay un montón de personas que no estarán aquí mañana» Además, el funcionario, aseguró que hay «seis o siete» bomberos que estaban en la zona al momento de la explosión, y permanecen desaparecidos. El periódico Waco Tribune reporta que mantuvo comunicaciones telefónicas con trabajadores de la zona e indicaron que hay una «gran cantidad de heridos». Muchas de las personas heridas pertenecen a las fuerzas de seguridad, ya que una gran explosión se produjo mientras trabajaban para evacuar a las personas y apagar el incendio interno. Por otro lado, habitantes de la localidad que tienen su vivienda ubicadas alrededor de la fábrica declararon haber sido «catapultados por la explosión».