Luego que se revelaran las pésimas condiciones en la que se hallaban pacientes psiquiátricos del Hospital de Bell Ville, el gobernador José Manuel de la Sota dijo hoy que le «duele el corazón».
«Hay algunas cosas se han ido haciendo . Hay otras que no, que son injustificales», dijo sobre los lugares destinados a salud mental.
«Me duele el corazón igual que ustedes ahora quiero saber por qué. Voy a invertir lo que tenga que invertir para que esto cambie», prometió en declaraciones publicadas por el portal de La Voz del Interior.
Aunque, prometió inversiones y dijo que habrá un relevamiento, también expresó que en las imágenes se ven a enfermos mentales «irrecuperables».
«Hay personas en nivel irrecuperable de demencia. No pueden estar vestidos porque se ahorcan (…) En cualquier lugar del mundo estas personas no tienen cama, comen cualquier cosa», dijo.