Mario fue quien encontró a su pequeño sobrino en un descampado, con signos de haber recibido una brutal agresión.
Un pequeño de tres años, identificado como Mateo Funes, fue hallado golpeado y ensangrentado en un terreno de la zona del Cementerio.
Mario fue quien encontrò a su sobrino de tres años, ensangrentado y golpeado en un descampado cerca de su domicilio.
“Estaba llevando un perro al descampado cuando una mujer me pregunta si no era mío el nene que venía caminando. Al principio no lo reconocí porque estaba bañado en sangre y con los ojitos morados”, dijo Mario. “Lo agarré y lo llevé al Hospital”.
Familiares de Mateo Funes creen que un reducido grupo de menores de entre once y trece años atacó ferozmente al pequeño Mateo, quien tiene golpes de caño, heridas profundas en la frente, marcas en el cuello, los deditos lastimados y un brazo fracturado.
Vecinos del lugar aseguran haber advertido a la policía sobre la existencia de un grupo de agresores en el barrio, “pero nadie hizo nada”.