En la actualidad, la artrosis no tiene una curación definitiva. El tratamiento está dirigido a aliviar el dolor, minimizar la incapacidad funcional y reducir al máximo la progresión de la enfermedad con el fin de mejorar la calidad de vida del paciente.
Uno de los avances más esperanzadores para el tratamiento de la artrosis son las técnicas basadas en células madre.
Según la jefa del Servicio de Reumatología del Instituto Ferrán en Barcelona, Dra. Violant: “la medicina regenerativa tendrá un papel relevante en la práctica clínica en un plazo de 10 a 15 años”. La investigación en esta área se centra en las formas de administrar y acoplar estas técnicas al tejido dañado.
Aunque todavía no es factible poder emplear las células madre como método para regenerar el cartílago, este tipo de investigación constituye el inicio de un tratamiento que puede llegar a ser una de las soluciones para la artrosis.
Las terapias biológicas han cambiado el pronóstico de muchas enfermedades reumáticas inflamatorias.
Fuente Servicio de Reumatología del Instituto Ferrán, Barcelona.
Horacio Vivir Mejor