Más de 250 automóviles circularon por el microcentro y hubo un caos de tránsito.
Más de 250 taxistas y remiseros se movilizaron para reclamar por la inseguridad en el sector y exigieron mayores medidas de control ante el jefe de la Policía, Carlos Borsato.
Los trabajadores del volante se concentraron en el sector del Andino y desde allí se trasladaron al centro de la ciudad, provocando un caos de tránsito.
Al llegar a Tribunales fueron recibidos por el fiscal Fernando Moine, a cargo de la investigación por el violento asalto el pasado viernes.
Los choferes aseguran que hay «uno ó dos asaltos cada fin de semana» y que las medidas de control impulsadas por la Unidad Departamental «no fueron eficientes».
El jefe de la Policía, Carlos Borsato, había señalado que se instalaron puestos fijos en los lugares más conflictivos y que algunas unidades habían incorporado botones de pánico, para alertar ante casos sospechosos. Sin embargo, la seguidilla de robos y la violencia con la que actúan los delincuentes desbordó la paciencia de las víctimas.
El pasado viernes el remisero Darío Villaverde, de 29 años, recibió 3 balazos durante un violento asalto ocurrido en barrio Alberdi y se recupera en el Hospital. Al caso se suman otros hechos, en los que ladrones armados redujeron ó golpearon a los choferes.
Por el atraco a Villaverde, la Policía detuvo a dos hermanos y secuestró elementos vinculados al hecho. Los sospechosos, imputados de robo calificado por arma de fuego, vivían a pocas cuadras del lugar donde se produjo el asalto.
“Se han secuestrado elementos que podrían tener relación con el hecho. Al remisero le robaron un frente de estéreo, una ticketera, la billetera y el dinero y en las próximas horas se realizará una rueda de reconocimiento”, aseveró el comisario Fernando Pereyra.
Villaverde fue baleado en un violento asalto ocurrido en Yapeyú al 1.500, en el sur de la ciudad. Se trasladaba en un Chevolet Corsa de la firma Gamma cuando subió a dos pasajeros en Perón Este al 450. Al llegar a calle Yapeyú los asaltantes lo amenazaron con un arma de fuego y le exigieron dinero y la ticketera.
Antes de huir, uno de los ladrones le efectuó tres disparos y se sospecha que el remisero habría intentado defenderse.