Los Juegos Olímpicos de Londres 2012 concluyeron este domingo y la incógnita que se cierne sobre el seleccionado argentino estriba en la continuidad o no de Emanuel Ginóbili, quizás, el jugador más determinante en la historia del básquetbol nacional.
El propio protagonista, a los 35 años, fue `bajando los decíbeles` de su anunciado retiro y en la capital británica, a diferencia de lo que había enunciado en Buenos Aires mientras se iniciaba la preparación, fue instalando la duda respecto de su retiro con la camiseta celeste y blanca.
Inclusive, en el post-partido con Brasil (82-77) por cuartos de final de la competencia, el astro bahiense interceptó a un colega que le inquirió sobre su eventual último encuentro y le aclaró: «Yo nunca dije que el domingo será mi último partido».
De esta manera, el sabor amargo que dejó el tropiezo ante Rusia (77-81), la pérdida de la posibilidad de cosechar la medalla de bronce y un implícito sentimiento de `revancha` que impera en el ánimo del representativo «más ganador» en la historia del deporte argentino le permitirían al escolta zurdo modificar su pensamiento.
«No sé si hay un compromiso de seguir jugando para la Generación Dorada», dijo este domingo el técnico Julio Lamas, cuando la derrota todavía no se había digerido en forma completa y las pulsaciones seguían girando en forma acelerada.
«Los jugadores hicieron un pacto, si se quiere, para estar en Londres. Del resto no se habló», completó el DT.
«Lo que hay que hacer es preguntarle a los jugadores qué es lo que quieren hacer», agregó Lamas.
De cara a lo que vendrá, el objetivo a mediano plazo se llama Mundial España 2014. A esa altura del calendario, `Manu` tendrá 37 años y, tal vez, menor rodaje con los San Antonio Spurs.
«Por ahí dentro de dos años, con (Emanuel) Ginóbili con menor cantidad de minutos en los Spurs, es probable que la llama siga vigente y la intención sea seguir jugando», confió a Télam una fuente cercana al representativo albiceleste.
Una cosa es segura. El técnico Lamas, que seguirá afectado al cargo (y desde ahora a tiempo completo, pues se alejó de Obras Sanitarias), anunció hoy que Pablo Prigioni, Andrés Nocioni, Carlos Delfino y Luis Scola «serán los pilares» sobre los que se apoyará la construcción del `nuevo` seleccionado.
«Este torneo no fue ninguna despedida», expresó el capitán Scola, de 32 años, para dejar por sentado que, quizás, buena parte de los protagonistas que defendieron y engalanaron la camiseta celeste y blanca estén dentro de dos años en la Copa del Mundo. Y muchos de ellos extiendan el crédito hacia los Juegos Río de Janeiro 2016.
«A Ginóbili hay que agradecerle todo lo que dio. Uno sabe lo que él hace en entrenamientos, en partidos, en el vestuario. Lo importante que es para el grupo. Se trata de uno de los mejores jugadores de la historia del básquetbol FIBA», precisó Lamas.
Pero en caso de que el bahiense, que lleva 14 años de lujosa trayectoria vistiendo la camiseta celeste y blanca, exteriorice sus ganas de seguir vinculado al equipo nacional, el técnico dio una muy buena pista sobre lo que hará en eventuales convocatorias.
«No hay que exigirle nada, ni presionarlo. Solamente escucharlo y si quiere seguir jugando, no hay dudas: le guardaremos la camiseta número 5», advirtió el DT.